POR FIN
Es muy posible que salga de la cárcel con los pies por delante
Por fin, al fin, ya era hora, “Josu Ternera”, el canalla terrorista Urruticoechea, va a ser juzgado en la Audiencia Nacional por el atentado a la Casa Cuartel de Zaragoza, en cuya masacre fueron asesinados cinco niños. Hasta la fecha, y desde que se fugó de España, Urruticoechea ha jugado con la Justicia española, recibiendo de la francesa un manto de protección a todas luces insultante. Eso, la “lucha armada”. La lucha armada contra cinco niños armados hasta los dientes de mochilas, libros, cuadernos, lápices de colores y un bocadillo para el recreo.
El autor material de aquella monstruosidad fue, entre otros, Henry Parot. El autor estratégico, “Josu Ternera”. Engañó a la Justicia francesa inventándose una enfermedad oncológica en fase terminal. Una fase, que por desgracia, jamás llegó. Se trataría, probablemente de un cáncer en la uña de un dedo. Se cortó las uñas y el cáncer desapareció. Pero la tardanza en juzgarlo por su “heroica” acción, también tiene sus ventajas. De haber sido juzgado inmediatamente después de la masacre, ya estaría en la calle, ya le habrían homenajeado en su “Ongui Etorri”, y viviría feliz y bien pagado en su caserío, disfrutando de sus paisajes verdes, de sus bosques frondosos y quizá, vendiendo en el mercado sus vacas y ovejas. Urruticoechea tiene en la actualidad más años que el firmante de este texto, y la condena, en el caso de que sea condenado y lo permitan la Fiscal General y el taimado Marlaska, puede alcanzar una cifra abrumadora de años de cárcel. Y les aseguro que a “Josu Ternera” no se atreve a indultarlo ni Pedro Sánchez.
Es decir, que es muy posible que salga de la cárcel con los pies por delante acompañado por las notas corales del “Eusko Gudariak”, lo cual carece de importancia porque un fiambre no oye lo que le cantan.
Urruticoechea tiene un hijo, también etarra. Es lo que establece el buen ejemplo. Como España es una nación tan generosa y olvidadiza, Urruticoechea llegó a presentarse por Herri Batasuna a las elecciones vascas, y se sentó en el Parlamento autonómico. No sólo se sentó, sino que promovido por su grupo asesino y el PNV, con el permiso del Partido Socialista, fue nombrado ¡¡¡Portavoz de la Comisión de los Derechos Humanos!!! en el Parlamento de Guernica. Cuando fue avisado de una inmediata detención, huyó a Francia, y de ahí cruzó el charco, como su gran amigo De Juana Chaos, al que Zapatero abrió las puertas de la cárcel y hoy vive en Venezuela al amparo de Maduro y de Podemos. Otro asesino en serie. De Juana asustó a Zapatero con una huelga de hambre, y atemorizado el Gobierno socialista, le permitió recuperarse en un hospital de San Sebastián. Escapó y ahí lo tienen, en los azules caribes. Pero Ternera no va a tener la misma suerte. A sus años, ingresar de nuevo en prisión es muy duro, y no lo va a hacer para pasar unos pocos días.
Por fin será juzgado el insuperable hijop*ta. De cuando en cuando, una noticia agradable.
Alfonso USSÍA