hay otra anecdota de ella entrando a una muebleria o un lugar que vendia ciertas sillas o algo por el estilo,con su hija, despues la busco con tiempo.
No era una muebleria, era la casa de Lady Hudson:
"Los traficantes de antigüedades, los joyeros y los propietarios de las propiedades guardaron sus objetos de valor antes de que llegara la reina María. Si ella veía un pequeño jarrón de plata o un plato de porcelana que le apetecía, insinuaría que esperaba que se lo dieran como regalo. En ese punto, el anfitrión o propietario no tuvo más remedio que entregárselo a la Reina. Luego, la Reina le indicó a su chofer que pusiera su nuevo adorno en el auto para agregarlo a la Colección Real.
Un día Queen Mary casi se encuentra con su pareja. Estaba tomando el té una tarde con la anciana Lady Hudson.
La Reina comenzó a admirar un juego de sillas que pertenecían a Lady Hudson. Las sillas fueron pintadas por Angelica Kauffman. La Reina remarcó que las sillas de Lady Hudson serían espléndidas con la mesa Kauffman que poseía. Sin duda, lady Hudson sonrió, pero no ofreció sus sillas a la reina María. El reloj marcó el tiempo. Queen Mary continuó sorbiendo su té. El sol bajó. La reina María todavía no daba señales de levantarse y marcharse.
Pasó más tiempo Finalmente, cuando el reloj dio las nueve en punto, Lady Hudson capituló. Se había agarrado con valentía, pero, al final, era una anciana y estaba lista para que la Reina se fuera a casa. Entonces "las sillas se dispararon en el Daimler real".
Encontre un par mas de anecdotas, pero esta era a de las sillas.