Es una crack del victimismo y lo peor es que haya quién se la crea y se piense ella que desde hace un més el mundo ya no gira.
Dejó las redes porque no ganaba ni un duro como influ, hacía el ridículo y perdía muchísimo tiempo y dinero en intentar vender que se compraba ropa y muebles. Porqué ni amigos, ni viajes, ni restaurantes, ni cita de novios ni nada, más que historias infumables que nadie ya se podía tragar.
Ni gimnasio, ni psicólogo, ni asesores del sueño ni dejar de fumar.
Pero lo importante es que por el momento aunque se haya abierto oooooootro IG privado (pero que a mí sus publicaciones me llegan) y haga el payaso por la cuenta del Meraki, controla un poco más su egocentrismo, la mitonamía y no hace tanto el ridículo ni deja en evidencia su simple y austera vida.