- Registrado
- 19 Feb 2010
- Mensajes
- 11.235
- Calificaciones
- 52.696
Barcelonesa, llevo en estos lares pocos meses así que hay cosas que no he leído, y pregunto a éste mi nuevo oráculo: ¿qué 'amoto'?
Herederos de Pilar, en un post de octubre de 2008
LEGENDS OF THE FALL-EASY RIDER (OCTUBRE 2008)
Tengo novio
¿Qué?
Que tengo novio.
Vaya por Dios, que tienes novio. ¿Y quién es?.
Es alto, muy alto, apuesto y canalla, llega en una impresionante Harley Davidson bruñida y reluciente que rompe los tímpanos con su estruendo ensordecedor; lleva una gruesa cazadora de cuero negro tachonada de clavos y unas inmensas botas de caña que le cubren hasta las rodillas, y un poderoso y macizo casco que es también completamente negro, hasta el visor...cuando aparece en el jardín y detiene ante mí su magnífica máquina yo me quedo paralizada, y cuando acelera clavado sobre el terreno parece que el mundo entero se deshiciera bajo sus talones...pero no traza ochos, eso no, él no es de esa clase de cretinos como ya te puedes suponer...de pronto corta el gas y la noche se sumerge en una calma sepulcral, apenas si se intuye el lejano rumor de los árboles y el tenue reflejo de la luna sobre sus toberas de plata, y yo permanezco inmóvil, absolutamente inmóvil y temblando como una hoja, advirtiendo sobre mí todo el peso de la oscuridad pero sintiéndome al mismo tiempo muy feliz, porque sé que este es el gran amor de mi vida y que me viene a buscar...una nube oculta la luna y me da ánimos para ensayar un paso, y otro, y estirar el cuello hasta que me duele tratando de descifrar alguna de las misteriosas inscripciones que jalonan los pliegues de su espalda, pero no alcanzo a entenderlas, desde mi lugar distingo una h, un 6, una nebulosa y retorcida forma que sugiere un candelabro, pero nada que ofrezca verdadero sentido...entonces él gira lentamente la cabeza y con gesto frío y majestuoso me indica que me acerque, y yo avanzo dos pasos más entre espamos de placer y el suave cosquilleo de mil agujas en la garganta...
¡Jesús!
Tranquila hermana...¡nunca me ha tocado!...cuando llego a su altura y me paro veo las sombras bailar sobre su casco y las piernas ya ni me sostienen, estoy aterrada, pero él hace otro leve gesto invitándome a subir a horcajadas y yo me muero por rodear con mis brazos ese inmenso pecho de acero y cabalgar a su grupa hasta el final de los tiempos...entonces es cuando recuerdo a mi hija...bueno, primero recuerdo que tengo algo importante que recordar y luego la recuerdo a ella, y retrocedo un paso para explicarle lo que me retiene aún, que no puedo abandonarla, pero antes de abrir la boca él me mira y sonríe, vamos que yo no puedo ver su cara porque está oculta bajo el casco pero sé que me dedica una sonrisa de alquitrán que taladra mis sienes…luego sus labios pronuncian una extraña palabra, una sola, y sin añadir más se da la media vuelta, yergue su moto de trueno sobre la rueda trasera y desaparece, y yo...
Basta. Sabes no es real, ¿verdad?. Pasas las 24 horas del día en este recinto, fuertemente custodiada, y nadie ha mencionado nunca a ese extraño motorista.
¿Que no es real dices?. Ya lo creo que es real; no como, no duermo, no vivo, paso cada día rezando porque se hunda el sol para percibir de nuevo el estrépito infernal que anuncia su regreso y correr espantada a su encuentro, alzar el visor que oculta su rostro y...
¡No, jamás! ¿Estás loca? Jamás, jamás se te ocurra alzar ese visor...
¿Eh? ¿Y por qué no, cómo iba a besarle si no?
Zenovia, retraída hasta entonces, prorrumpió en una brutal carcajada.
¿Besarle?...¿y cómo habrías de besarle, pobre estúpida? ¡No tiene cabeza!.
¿Qué?...mientes...¡Mientes bruja, mientes porque que lo quieres sólo para ti, porque te devoran los celos, porque tu marido ya ni te dirige la palabra!
Súbitamente la princesa saltó de su silla y ¡ris! ¡ras!, cruzó salvajemente la cara de su hermana. ¡No te irás!-susurró entre dientes, y volvió a su sitio. Shellma quedó unos segundos como inerte, con los ojos en blanco y las manos rígidas; luego rescató una voz terrosa y nasal, que parecía provenir del otro lado de una tumba.
¿Cuándo podré ver a mamá?
Ya pronto.
¿Y a mi hijita?
Sabes que eso no depende de mí, es cosa de los médicos.
Tú eres quien dispone lo que deciden los médicos. Necesito verla.
Te repito que no se puedo hacer nada, estás muy enferma.
Por eso, porque estoy muy enferma necesito verla.
Hablaré con el especialista, pero no te prometo nada...¿crees que sería lógico abandonar un bebé al cuidado de una persona en tu estado?...sufres graves alucinaciones.
¿Por qué has dicho que el motorista no tenía cabeza?
Era una forma de hablar, quise decir que no existe.
Pero no dijiste que no existiera, dijiste que no tenía cabeza...¿por qué?...a ti también te ha visitado, ¿no es cierto?...y alzaste su visor para tratar de besarle...sí, tú te atreviste, tú siempre fuiste la más atrevida, la más ambiciosa, la más ávida, pero ahora tienes demasiado que perder, por eso el terror te consume, por eso niegas tu destino, por eso levantas muros alrededor de tus pequeñas, aun sabiendo que no hay muro lo bastante alto como para detener su furiosa carrera… Pero yo no deseo evitarle, quiero ser suya, fundirme en la forja de sus brazos y hervir en la negra eternidad de sus pupilas, ascender sobre sus alas de murciélago hasta las más remotas estrellas y bañarme en su resplandor de pesadilla, quitarle el casco y besar esos labios de niño, de fuego, de locura, porque él es bello y siniestro como un ángel sin dueño, libre como un hijo que acabara de matar a su padre, su aliento incendia cada sombra de la noche y su mirada de hielo fulgura en cada tiniebla, si el Espíritu Santo disfruta de orgasmos seguro que los alcanza soñando con él...
Caramba hermanita como hablas, pareces otra...¿has andado enredando con la internet últimamente o será cosa de la medicación?...en cuanto a ese motorista, no importa quien sea, si se interpone en mi camino le arrancaré las entrañas…en fin debo irme ya, mañana temprano tenemos otro acto, otro rifi-rafe de mocosos digno de los polis de la guardería, los asesores insisten en esta campaña de poca monta que representa para mí un grave error, se empeñan en rebajarnos al nivel de dos monjitas trinitarias cuando nuestro status debería afianzarse en apariciones de mucho mayor calado institucional...y mi suegro que no suelta el bastón, se aferra al trono como un percebe, pero eso ya es otra historia...en cuanto a lo de tu hija, vamos a necesitaros en breve porque la gente comienza a murmurar, otro corto paseo pero esta vez con padre incluido, a ver como lo arreglo...ciao cara, pórtate bien.
¿Para qué seguir?, esto es lo que hay...y quien sonría pensando que lo que ha leído no es más que un refrito iniciático entre el Cuervo de Poe y las Hermanas Karamázov, quizás se lleve de aquí al verano la sorpresa de su vida. Un saludo a todos.