He visto el trozo de el programa Horizonte y me parece súper acertado lo que dicen, incluida la responsabilidad por parte de las familias. Es cierto que no es fácil educar pero hay que corregir la conducta antes, cuando son más pequeños para que de adolescentes no se les vayan de las manos. Un niño con normas y límites no escala tanto a extremos como esos. Y está claro que cuando la administración entra de por medio es porque están ya perdidos del todo y son auténticos delincuentes inasumibles de corregir por la familia. Increíble también que no se valore la formación ni la especificidad de trabajar con menores problemáticos y metan a cualquier persona o personas que con formación estén con contratos de mierda. Que rabia de verdad todo esto.