Su último deseo: el Príncipe Henrik sorprendió a Margrethe en la iglesia
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El propio príncipe Henrik había planeado su último viaje, y hasta su último viaje también había preparado un saludo final muy especial y conmovedor para su querida esposa, la reina Margrethe.
"Fue el deseo del Príncipe Henrik sorprender a la Reina por última vez. Por lo tanto, las guirnaldas y flores dispuestas como un "jardín en flor" , donde han compartido varias fotos de la configuración de hermosas flores que se encuentran en la antigua capilla el día de hoy,
Hubo una razón muy especial y conmovedora por la cual las flores deberían organizarse como un "jardín floreciente".
El discurso de la boda y el amor omnímodo del príncipe Enrique por Margrethe también fueron algo que el
confesor Erik Norman Svendsen recibió el martes en la iglesia del castillo.
- Podemos recordar especialmente hermoso y moviendo el habla a su esposa en la cena en el castillo de Fredensborg, con un pasaje de un poema de Christian Winther, dijo la bella danesa del príncipe Henrik: "Vine de una flor de la tierra en un jardín floreciente: ácido y lluvia dorada, estante y bonderose, flores en parques, campos y bosques, flores en la zanja. Pero la niña era la decoración más hermosa del océano. "En ese día, Dinamarca llevó al hermoso y elegante príncipe al corazón", dijo Erik Norman Svendsen
El discurso de la boda, que el príncipe Henrik celebró en el castillo de Fredensborg durante la boda en junio de 1967, tuvo lugar en danés, y el príncipe Henrik posteriormente declaró que era una sorpresa para Margrethe que el discurso fuera en danés y no en francés.
En el discurso de la boda, también dijo: "Como su esposo y su apoyo en el trabajo, siempre encontraré la felicidad en mi vida".
El 10 de junio de 1967, la princesa de 27 años Margrethe dijo "sí" a su conde francés Henri en la iglesia de Holmen en Copenhague. Aquí, Henrik, de 32 años, está hablando con su esposa. Foto: Por todos lados
A lo largo de la semana hasta el funeral del Príncipe Henrik, la Reina Margrethe ha sido valiente e incluso logró encontrar una sonrisa en medio de la tristeza.
Pero bajo el último salmo, "Tú que has convertido millones de estrellas", las lágrimas comenzaron a trinar por la mejilla de la Reina Margrethe, 
