“Ya tengo diseñado el vestido que me pondré para la boda: largo, de color crudo, en seda, vaporoso y con escote”.
Norma, con esos datos está claro que tú piensas casarte en camisón, confiesa, pillina.
A mí no me cae mal, que ella sola está levantando cada verano la industria de Lejía Conejo con la manía de los posados veraniegos con toda la family de blanco impoluto. Los niños crecen y se echan pareja: pues no pasa nada, ella les endosa un conjunto blanco y a la foto, que aún somos pocos.
Norma nos da ejemplo de cómo el blanco es el color ideal para cada situación de la vida:
- Para anunciar que va a ser abuela (todos de blanco)
- Para ir a San Isidro, con bombín a juego. El Marichalar no tan a juego, qué rabia!...
- Para anuncial gel Nelia.
- Norma en la nieve.
- Norma en Semana Santa. "La Cosa Rosa" del pie de foto aludirá sin duda a los zapatos.
- De blanco para ir a comprar ropa blanca. Si la dueña de la tienda no llega a ir de blanco no hay foto.
No es extraño, pues, que Norma necesite a su lado un millonetis para sufragar tanto gasto en blanco nuclear, lejía por bidones, los rayos UVA para hacer contraste con la ropa un día sí y otro también...
Está visto que el color blanco no es para pobres.