Por su papelón antes de las elecciones pronosticando el sorpasso de podemos y exigiendo a Pedro Sánchez que se pegase un tiro y dijese que iba a apoyar a Pablo Iglesias, su barcelonismo forofo y radical, su soberbia con los comentaristas, la escasa por no decir nula participación de la audiencia en su programa, entre otras cosas, no la aguanto. Cuánto échamos de menos a Carlos Llamas! Del premio que opinen los donostiarras.