Yo soy pequeña, de altura soy casi como Letizia y soy delgada pero toda la vida he tenido un c*lo enorme. Tengo el c*lo por el que la gente va a Brasil y a Colombia y a Tijuana y por el que se inyectan cemento y se mueren. La razón es esencialmente la misma que la de estas niñas, mi padre es americano blanco de origen irlandés y mi madre es latinoamericana. Las personas no se cortan a la hora de traerlo a colación, que no tengo porporción en el cuerpo, los hombres me hostigan y me cosifican, Soy profesional, tengo 4 títulos, hablo 4 idiomas y me visto de estilo modesto porque es mi gusto, no para disimular. Me gustan las mangas largas, los vestidos y faldas largas, me encantan los vestidos y faldas que tienen una cinturilla y abren fruncidas o en línea "A". Todos me disimulan, más o menos, no tanto. Pero también me gustan los pantalones pitillo, las faldas lápiz y estos vestidos que están de moda ahora que son de un algodón tipo jersey grueso y rectos pero no apretados (como el que usó Alexia para bautizar el navío pero sin los volantes). Me hacen un c*lo enorme, pero es el que tengo, procuro que no se me marque la ropa interior, la uso especial sin costuras y ese tipo de cosas.
Lo que quiero decir es que estas niñas tienen el cuerpo que tienen y encima están sujetas al escrutinio público y el escrutinio en redes en donde la gente no tiene filtro ni compasión. Yo creo en enseñar a las personas a vestirse para su cuerpo pero también en que cuando tenemos atributos así, no crearles una noción de que tienen un cuerpo incorrecto y mucho menos impúdico y que lo tienen que esconder. Cuando Leonor de España multiplicó el busto se empezó a vestir para esa nueva figura. La ropa estará linda o fea, juvenil o viejuna, pero no se lo está escondiendo o aplastando ni enseñando de manera impropia para su edad o rol institucional. Amalia y Alexia se habrán puesto una ropa interior adecuada, tal vez un spanx. Están muy bien.
Cuando yo era adolescente y joven adulta no me servían bien la mayoría de los jeans y los pantalones casuales que vendían por el tamaño de mi trasero. Cuando encontraba algo lo tenía que entallar en la cintura. Una vez me apareció un pantalón que me quedaba perfecto y cómodo, era como acampanado y con unas rayitas verticales que además me alargaban un poco. Como era cómodo un día lo usé para viajar. Mi madre me llevó al aeropuerto y me dijo que no entendía por qué me tenía que poner esos pantalones tan apretados (tenía un poco de licra pero no era elástico ni apretado) para andar enseñando ese c*lo, que si era para llamar la atención (de los hombres, básicamente). Me sentí tan humillada que todo el rato que estuve en fila para registrarme para el vuelo estuve llorando a lágrima viva. Siempre me hizo sentir como si fuera mi culpa, como si yo fuera impúdica. Y es de lo peor que se le puede hacer a una mujer en cuanto a su cuerpo., como si detrás de
Los labios también los veo normales. Una de las cosas con el maquillaje ahora que las niñas se echan dos horas en producirse con el contouring y toda la cosa, es que viene una rutina de labiales para crear efecto "plumping" como si te hubieras inyectado. Los veo a cada rato, hasta descontados en TJMaxx de buenísimas marcas. Creo que todas estas niñas están bien. Las de todos los países, incorporándose en unos roles públicos incómodos tal vez para sus edades lo mejor que pueden.