Los misteriosos casos de Leticia Sabater
No es nada particular, pero llevo tiempo observando a esta señora más allá de su fatuo personaje televisivo, de aparente ingenuidad y grotesca compostura.
Tras su personaje infantilizado, se esconde una mujer fría, tremendamente inteligente y astuta. Ambiciosa sin límites, ególatra y llena de complejos.
Supo hacerse con un buen capital, pero no solo de trabajo duro, como dicen, también de encuentros con ciertos personajes relevantes de la época, políticos etc que sucumbían a los encantos de la presentadora infantil del momento y no escatimaban en regalos e ingentes cantidades de dinero.
Años después, cuando ya no la llamaban de ningún programa, se dedicó a recorrerse todo España con el Circo Alegría, se podían ver sus carteles colgados en los pueblos más remotos y olvidados.
Después de algunos romances infructuosos se enamoró perdidamente de Bobby, reconocido en la noche madrileña y de quien se comentaba era también prestamista.
Una noche después de salir de juerga, ambos, nunca más se supo de él. Cuando este hecho salió a la luz, gracias a la llamada desesperada de la familia de Roberto, Leticia acudió a muchos programas a contar la historia.
En uno de ellos aseguró que había recibido un SMS de Bobby donde le decía que estaba en Brasil.
Extraño cuanto menos.
El chico le debía bastante dinero a Leticia, y ella intentó cobrarlo a la familia de él.
Lo que confirma más mi teoría de su psicopatía es lo ocurrido hoy mismo. Después de haber fallecido su hermana anteayer hoy se presenta en un Sábado Deluxe, cobrando cuatro duros, con cirugía nueva.
Juzguen ustedes mismos, olvídense de Al medio día alegría y vean a la persona real que se esconde tras este disfraz.