Se ha publicado otro artículo en Vogue:
Pelayo Díaz. Cuando los sueños se hacen realidad:
http://www.vogue.es/moda/articulos/entrevista-a-pelayo-diaz-kate-loves-me/19812
Pelayo Díaz nos abre las puertas de su casa y nos habla sobre su relación con la 'maison' Louis Vuitton
Flora González — @FloraGonzalez — Aunque su pasión por la moda le viene dada prácticamente de nacimiento, fue en torno a 2006 cuando vivió uno de los puntos de inflexión más transcendentes de su vida al convertir -cambiando Tumblr por la blogsfera-
Kate Loves Me en el lugar donde proyectar al mundo sus inquietudes artísticas, sus inspiradores y originales looks diarios y el creciente frenesí en el que día a día se ha convertido su vida. Asturiano de nacimiento y formado, entre otras, en la
Central Saint Martins de Londres, Pelayo Díaz Zapico -o mejor dicho, su
alter ego Prince Pelayo- se ha ganado en este tiempo apellidos como el de
It boy. Sus colaboraciones en el universo de la moda cuentan con firmas de lujo como Alexander McQueen, Giles Deacon, Davidelfin y ahora, Louis Vuitton. Ahora, el jove n
influencer abre las puertas de su casa en Madrid al equipo de
Vogue.es para mostrarnos su particular colección de pequeñas obras de arte y hablar de su relación con la
maison parisina.
Con una camisa de cuadros perfectamente abotonada, sus ya imprescindibles pantalones bermudas y una sonrisa cálida y radiante, Pelayo se sienta en una de sus banquetas favoritas mientras sostiene entre sus manos una abarrotada agenda con el legendario
Monogrampara revivir, una vez más, el sueño cumplido con su colaboración para la firma. Todo comenzó hace dos años: "ésa fue la primera toma de contacto con Louis Vuitton, me invitaron a la presentación de
la colección especial de Yayoi Kusama en Nueva York, estuve con ellos tres días y desde entonces me invitaban a los desfiles para hacer la cobertura", explica con ternura y añade que "es un honor que una marca como Vuitton quisiera mi presencia en los desfiles". Pero lo mejor vino con una llamada de Adriana Lagunes
–Digital Correspondentde la firma en España– con una propuesta más que tentadora: "¿Te gustaría ir al primer desfile de Nicolas Ghesquière para Louis Vuitton?". La respuesta fue un rotundo sí.
'Es un honor que una marca como Vuitton quisiera mi presencia en los desfiles'
Todo sucedió muy rápido. Allí, sentado en tercera fila, Pelayo descubrió que desde su sitio podía ver el
backstage: "podía ver a las modelos incluso antes de que saliesen sobre la pasarela, así que pude hacer fotos muy espontáneas, que iban más allá del clásico
look de desfile", explica gesticulando con pasión y haciendo notar los relucientes anillos –uno de ellos con forma de corona– que aportan un toque muy especial y misterioso a su manera de moverse. "Al mes me llamaron diciéndome que les habían gustado mis fotos, y querían proponerme hacerlas para el
Instagram oficial de Louis Vuitton de cara al desfile Crucero que se celebraría en Mónaco".
Un viaje a París para la reunión y la colaboración fue un paso más allá al sumar una especie de precalentamiento con imágenes de edificios y del ambiente que se respiraba en la ciudad, la cobertura del desfile y una sesión muy especial con Alba Galocha. "Querían fotos diferentes, muy a mi estilo. Fue determinante que me diesen
carte blanche y además tuve el privilegio de poder usar los
looks y mezclarlos entre sí, es algo que no se suele hacer".
© FOTOGRAFÍA: A.MORAL
El ambiente se vuelve reflexivo cuando le preguntamos por los cambios que aprecia en esta nueva etapa de la
maison, las diferencias que marca Nicolas Ghesquière frente al anterior director creativo, Marc Jacobs. Se toma un instante y asegura que, en su opinión, "ahora la marca tiene una identidad mucho más allá del
Monogram, se está volviendo más femenina y con mucha esencia. Pienso que Louis Vuitton camina hacia el hecho de convertirse en una casa de referencia no sólo por sus legendarios bolsos sino también por el
pret-à-porter. Ya no es sólo una prenda icónica, ahora es un vestuario, que es lo que las mujeres necesitan, una coherencia". Mientras habla, se levanta hacia una de las estanterías al fondo del salón y vuelve hojeando apasionado un libro de Louis Vuitton con la historia y los iconos de la marca. 'Me encanta el
Speedy, ¿ves?...".
Ello nos lleva a plantearle seguir soñando y pensar cómo sería un bolso de Louis Vuitton reinventado por él mismo –
su última colección de bolsos para Davidelfin ya está a la venta– y qué aspecto tendría. "Como viajo mucho, me encantaría hacer mi maleta de equipaje de mano ideal, cambiaría los colores, incluso el material, lo imagino metálico...". La verdad es que lo raro es que pase más de dos semanas seguidas en Madrid, sino que su vida se dibuja en París, Londres, Los Ángeles... "Donde esté el trabajo, voy. Me subo a los aviones que haga falta", sentencia divertido. Y de ahí, de sus múltiples viajes y experiencias es de donde parte su particular colección de piezas y pequeñas obras de arte, unos elementos decorativos que se disponen por toda la casa.
Tras la conversación, se levanta de la banqueta, deja con mimo la agenda sobre la mesa y nos realiza un pequeño
tour narrando la historia que albergan cada uno de esos coloridos e intrigantes objetos.
Así es el universo creativo de Pelayo Díaz en el corazón de Madrid.