Bueno, el problema es que vivimos en una cultura en la que la salud mental está completamente victimizada, y es por ésto que las personas menos prosociales se benefician de ello. A la gente de "a pie" no le entra en la mollera que hasta las personas menos sociales (por ejemplo, lo que vulgarmente se conocen como "psicópatas") sienten ansiedad. En cuanto se oye que alguien "tiene ansiedad" automáticamente es sujeto de la más absoluta lástima, y no se tienen en cuenta otros aspectos de su personalidad; por ejemplo, en el caso que nos acontece, que tiene unos rasgos histriónicos muy marcados, y por ello se aprovecha de esta ansiedad para reforzar su necesidad de atención.
Todos tenemos ansiedad y es un drama, pero hoy día está sobrediagnosticada como un trastorno, y el problema es ése: se posiciona a quien lo sufre como una víctima inofensiva, y quienes son histriónico-narcisistas se aprovechan de la situación para reforzar estos caracteres desadaptativos y, por ende, no cambiarlos. Es un círculo vicioso. Jamás dejará de tener esa ansiedad narcisista. De mientras tanto, que le saque buen rédito.
Todos tenemos ansiedad y es un drama, pero hoy día está sobrediagnosticada como un trastorno, y el problema es ése: se posiciona a quien lo sufre como una víctima inofensiva, y quienes son histriónico-narcisistas se aprovechan de la situación para reforzar estos caracteres desadaptativos y, por ende, no cambiarlos. Es un círculo vicioso. Jamás dejará de tener esa ansiedad narcisista. De mientras tanto, que le saque buen rédito.