Más problemas para Alvise: el Grupo de Conservadores y Reformistas de la UE tampoco le quiere
Se Acabó la Fiesta
no formará parte de Conservadores y Reformistas (ECR), el grupo que lidera
Giorgia Meloni en el Parlamento Europeo. Alvise Pérez anunció en redes sociales el pasado mes de julio que su agrupación de electores pasaba a engrosar la alianza impulsada por Hermanos de Italia, pero ya entonces fuentes de ECR, grupo en el que estaba integrado Vox la pasada legislatura, advirtieron que la solicitud
no implicaba la entrada automática y que debían examinar “en detalle” la propuesta. Finalmente, la asociación no ha cuajado, como se puede comprobar en
el documento difundido por el grupo con la fotografía de todos sus miembros. El tropezón en Bruselas se suma a la polémica que envuelve a SALF y al Madeira Invest Club por
supuesta financiación ilegal del partido.
Ahora SALF tiene dos opciones, o integrarse en el grupo
Europa de las Naciones Soberanas, impulsado por Alternativa por Alemania, o quedarse como no inscrito. En la
Cámara comunitaria, los europarlamentarios no se agrupan por nacionalidades, sino por grupos con similitudes ideológicas, y en el resto parece complicado que Pérez y los otros dos representantes que obtuvo la agrupación,
Diego Solier y Nora Junco, tengan hueco. Bien por diferencias programáticas y de valores o por otros motivos, como la pugna que SALF mantiene con
Vox, con una bolsa de electores común. Este periódico ha intentado sin éxito ponerse en contacto con Pérez para obtener su versión.
Tras los comicios europeos, Pérez acusó a Vox de
vetar su entrada en ECR. "Es una lástima
no tener siquiera negociaciones con todos los grupos de interés porque políticos de tu propio país te intenten sabotear. No pasa nada; tenemos una idea mejor", censuró el agitador ultra. Entonces, se daba por hecho que los de Abascal compartirían bancada con Hermanos de Italia, como había sucedido la pasada legislatura, pero optaron por integrarse en
Patriotas por Europa, de nueva creación y con un perfil más derechista, impulsado por el húngaro
Viktor Orbán. Estos últimos han logrado concitar más apoyos y convertirse en el tercer grupo más importante del Parlamento comunitario, con 84 eurodiputados, por detrás de
los populares (188) y
socialdemócratas (136). ECR es el cuarto con 78.
Tras el cambio de compañeros de Vox, SALF solicitó formalmente a los Conservadores y Reformistas integrarse en el grupo. “
Alvise Pérez cierra un acuerdo con Giorgia Meloni y
se integrará en el Grupo ECR del Parlamento Europeo. El líder de SALF ha pactado fortalecer la influencia europea contra la inmigración ilegal, corrupción y soberanía nacional española”, tuiteó a finales de julio
Vito Quiles, entonces jefe de prensa de Pérez. Sin embargo, fuentes oficiales del grupo matizaron que SALF simplemente había presentado una solicitud formal y eso no equivalía a un visto bueno para su adhesión.
“Aún
no se ha tomado una decisión sobre su integración”, explicaron a El Confidencial desde ECR. Las mismas voces detallaron que los responsables del grupo examinarían “en detalle” la propuesta, pero que la decisión final
dependería del conjunto de miembros, compuesto por 78 eurodiputados, procedentes de Hermanos de Italia,
los polacos de Ley y Justicia (PiS), la Alianza para la Unión de los Rumanos o el Frente Nacional Popular de Chipre, entre otros partidos.
“Se espera que las deliberaciones continúen en septiembre.
La regla general es que cualquier miembro del
Parlamento Europeo que comparta nuestros valores puede solicitar ser miembro”, señalaron las fuentes consultadas en referencia a la Declaración de Praga, entre cuyos postulados destaca la defensa de la libre empresa y libre comercio, el reconocimiento de la importancia de la familia o una apuesta por una
inmigración “controlada”.
Ahora habrá que ver
qué pasos da Pérez. Tras las elecciones europeas ya se especuló con la integración de SALF en el grupo Europa de las Naciones Soberanas. Es otro de los grupos de nueva creación que ha traído la nueva legislatura en
Bruselas y está considerado
el más extremo de la derecha. Cuenta con 25 miembros de ocho países y está liderado por Alternativa por Alemania. El partido fue expulsado de Identidad y Democracia, el grupo en el que la pasada legislatura se encuadraba Le Pen, después de que uno de sus miembros asegurase en una entrevista que "nunca diría que todo hombre que llevara
un uniforme de las SS fuera automáticamente un criminal".
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Se Acabó la Fiesta
no formará parte de Conservadores y Reformistas (ECR), el grupo que lidera
Giorgia Meloni en el Parlamento Europeo. Alvise Pérez anunció en redes sociales el pasado mes de julio que su agrupación de electores pasaba a engrosar la alianza impulsada por Hermanos de Italia, pero ya entonces fuentes de ECR, grupo en el que estaba integrado Vox la pasada legislatura, advirtieron que la solicitud
no implicaba la entrada automática y que debían examinar “en detalle” la propuesta. Finalmente, la asociación no ha cuajado, como se puede comprobar en
el documento difundido por el grupo con la fotografía de todos sus miembros. El tropezón en Bruselas se suma a la polémica que envuelve a SALF y al Madeira Invest Club por
supuesta financiación ilegal del partido.
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