HEROÍNA
abril 11, 2022
Lo primero, la identificación y descripción. Lo segundo, la heroicidad de su acción. Lo tercero, la loa y el elogio. Se trata de una heroína.
Su nombre, Norma Rebecca –con doble c-, Tomelloso Urquinaona.
Nacida en Consolación, Ciudad Real, el 8 de marzo de 1996. Hija de Riquelme Tomelloso Puigdemont – pura casualidad-, y de Lorenza Urquinaona Mercadá de Domenech. Su padre, don Riquelme, senderista; su madre, doña Lorenza, cocinera de barbacoas en jornadas campestres y autora involuntaria de más de 47 incendios forestales. La niña, Norma Rebecca, estudió manualidades y terminó de ayudante becaria sin sueldo en el departamento de prensa de Podemos.Bello rostro y bella estampa. Ascendió con celeridad y ocupó la jefatura de la Redacción de Frases Cursis del partido de las igualdades sociales. Escribió discursos a Pablo Iglesias, Irene Montero, Ione Belarra, Yolanda Díaz y Mónica García. Autora de la brillante presentación de ésta última, “Mónica, Médica y Madre”. Pablo Iglesias le encomendó diferentes tareas que cumplió a plena satisfacción. Tareas domésticas, no vayan los lectores a figurarse otro tipo de encomiendas.
Intimó en guateques y reuniones de su partido con Teresa Arévalo y Gara Santana, mujeres entregadas a la infancia. En su interior, la lucha titánica entre el bien de la vida y el mal de la muerte. Afortunadamente, conoció al Padre Ángel en una fiesta podemita y aclaró su mente. Formó parte del Taller de Interrupción del Embarazo que organizó en verano del 2020 el partido de la gente en Fermosell de la República, provincia de Lérida. Allí actuó de conferenciante con éxito rotundo. Pero aquel año tuvo que superar su gran prueba.
En enero, recibió la llamada de Teresa Arévalo, que trabajaba con Irene Montero en el ministerio de Igualdad cuando en realidad lo hacía de niñera en el complejo Iglesias-Montero de La Navata, en Galapagar. Había sido descubierta, la noticia se extendió y difundió rápidamente, y para colmo había sido imputada o procesada por un juez. Le ofrecía su puesto de niñera por indicación de la señora ministra. Y Norma Rebecca, a sabiendas de lo que hacía, rechazó la oferta. –¿Voy a cobrar lo mismo que tú?-, le preguntó a Teresa-. –No creo, Norma Rebecca, porque yo soy alta asesora de la señora ministra y percibo mi salario del Ministerio-. –Pues nada. Me quedo donde estoy-.
En septiembre de ese mismo año, se citó a merendar con Gara Santana, jefa de prensa de Podemos, y también utilizada como niñera por la ministra de Igualdad. Y Norma Rebecca fue de nuevo tentada. – Me han pillado también a mí. Irene está muy nerviosa, Pablo aparece muy poco por casa, y me ha pedido que te ofrezca mi puesto-; – ¿El de periodista? – No, estás loca, Norma Rebecca, el de niñera ilegal-.
Lo rechazó también. Su doble heroicidad le ha llevado a vivir en el extranjero. Ha sido contratada por Mohamed de Marruecos para poner las banderas de sus invitados a comer dulces. Y por ahora lo está haciendo bien y sin cometer errores. Pero no se atreve a volver a España. Irene no olvida, y con 20.000 millones de euros en su poder, es capaz, -ay, qué susto-, es capaz – ay, qué espanto-, es capaz de cualquier cosa.
Mejor que se quede en Rabat.
Alfonso USSÍA