Yo estoy muy lejos de ser defensora de Iker, que siempre me ha caído peor que mal, pero al César lo que es del César.
Se ha ido a Argentina a trabajar, a ganar dinero para, entre otras cosas, dejar arreglado el futuro de sus hijos y pagar la exorbitada pensión de su ex mujer, que trabajadora no ha sido nunca. Quiero decir, a esos niños jamás les ha faltado de nada ni les va a faltar de nada, y están teniendo una educación de absoluto élite y si quieren una educación universitaria al alcance de muy pocos, porque el padre desde muy joven está ganando ese dinero con el sudor de su frente.
Yo no me hubiera ido tan lejos ni me hubiera separado de esa manera de mis hijos pero tampoco es justo recriminarle que se haya ido; si él no gana dinero, a ver de qué viven los niños y Andrea. Porque ella, doblar el lomo y madrugar como el resto de mortales, no. Lo suyo son las vacaciones, los tratamientos en Henao, el gym los miércoles y 4 fotitos y un vídeo diciendo lo madraza que es porque se encarga ella de todo.
Hombre, se encarga ella de todo lo que no es ganar dinero para pagar colegios, extraescolares, casas, ropa, comida, ayuda doméstica, nannies... Se encarga de lo bonito de la maternidad (que también tiene su parte dura) porque tiene detrás a una persona haciendo todo lo demás posible y sin poder verlos.