Yo no tengo la certeza de que este fuera un braguetazo para él. La ridículamente pretenciosa, mediocre, sosa, antipática, soberbia y feúcha Lee Bouvier (quien siguió presentándose como una princesa y utilizando el apellido Radziwill hasta su muerte a pesar de que era un título de cortesía, que no tenía derecho a usar desde que se divorció del príncipe Stanislaw Radziwill en 1978), estaba montada en el aire como los diamantes: tenía muchos contactos y prestigio por ser la hermana de Jackie Kennedy-Onassis y provenir de una familia neoyorquina de abolengo, pero era pobre de solemnidad y si no se hubiera casado con el exitosísimo y rico Herbert Ross, hubiera tenido problemas para continuar fumando cigarrillos de lujo para evitar comer.
Aunque su hermana es una de las famosas más inexplicablemente hipervaloradas de la historia (no tenía ninguna gracia, era pavisosa, ignorante, fría, afectada y estaba dispuesta a hacer lo que fuera con tal de acumular dinero y tener estátus), por lo menos logró casarse con hombres realmente importantes y poderosos. No sé cómo, pero lo logró y muy bien logrado. Lee, por otro lado, no consiguió establecerse hasta que decidió ser la pantalla social de Ross, porque su primer marido Michael Canfield tenía que trabajar para poder vivir, a pesar de sus muchísimos contactos entre la alta aristocracia europea. Luego, Stanislaw Radziwill no era rico ni de lejos y sólo consiguió casar bien a sus hij@s porque los colocó con nuevos ricos ávidos de títulos nobiliarios.
Esta mujer vivió toda la vida de "glorias" ajenas y estaba amargadísima por ello. Por cierto, el lío que montó durante la premiere de "Magnolias de Acero" en Londres, es digno de análisis psiquiátrico. Lee, quien se consideraba más importante que todos por ser "princesa" y la mujer del director, le robó el asiento a Julia Roberts para poder aparecer en primera fila junto al príncipe Carlos y Diana en las fotos, en las que sonreía satisfecha a pesar de que Ray Stark, el productor de la película, quien estaba sentado justo detrás de ella, se pasó toda la proyección llamándola cunt y bitch por haberle robado el momento a la estrella de la cinta. Para colmo, como le tenía una envidia atroz a Jackie O, Lee se acostó con JFK, Onassis y el fotógrafo Peter Beard (uno de los grandes amores de la Kennedy-Onassis), sólo para hacerle daño a su hermana y poder decir que era mejor que ella.
Lee “Radziwill” tenía muy mala entraña. Murió millonaria y en su testamento no le dejó un centavo a la viuda de su hijo, quien lo cuidó con devoción hasta lo último (tenía cáncer).
Yo no tengo la certeza de que este fuera un braguetazo para él. La ridículamente pretenciosa, mediocre, sosa, antipática, soberbia y feúcha Lee Bouvier (quien siguió presentándose como una princesa y utilizando el apellido Radziwill hasta su muerte a pesar de que era un título de cortesía, que no tenía derecho a usar desde que se divorció del príncipe Stanislaw Radziwill en 1978), estaba montada en el aire como los diamantes: tenía muchos contactos y prestigio por ser la hermana de Jackie Kennedy-Onassis y provenir de una familia neoyorquina de abolengo, pero era pobre de solemnidad y si no se hubiera casado con el exitosísimo y rico Herbert Ross, hubiera tenido problemas para continuar fumando cigarrillos de lujo para evitar comer.
Aunque su hermana es una de las famosas más inexplicablemente hipervaloradas de la historia (no tenía ninguna gracia, era pavisosa, ignorante, fría, afectada y estaba dispuesta a hacer lo que fuera con tal de acumular dinero y tener estátus), por lo menos logró casarse con hombres realmente importantes y poderosos. No sé cómo, pero lo logró y muy bien logrado. Lee, por otro lado, no consiguió establecerse hasta que decidió ser la pantalla social de Ross, porque su primer marido Michael Canfield tenía que trabajar para poder vivir, a pesar de sus muchísimos contactos entre la alta aristocracia europea. Luego, Stanislaw Radziwill no era rico ni de lejos y sólo consiguió casar bien a sus hij@s porque los colocó con nuevos ricos ávidos de títulos nobiliarios.
Esta mujer vivió toda la vida de "glorias" ajenas y estaba amargadísima por ello. Por cierto, el lío que montó durante la premiere de "Magnolias de Acero" en Londres, es digno de análisis psiquiátrico. Lee, quien se consideraba más importante que todos por ser "princesa" y la mujer del director, le robó el asiento a Julia Roberts para poder aparecer en primera fila junto al príncipe Carlos y Diana en las fotos, en las que sonreía satisfecha a pesar de que Ray Stark, el productor de la película, quien estaba sentado justo detrás de ella, se pasó toda la proyección llamándola cunt y bitch por haberle robado el momento a la estrella de la cinta. Para colmo, como le tenía una envidia atroz a Jackie O, Lee se acostó con JFK, Onassis y el fotógrafo Peter Beard (uno de loscon grandes amores de la Kennedy-Onassis), sólo para hacerle daño a su hermana y poder decir que era mejor que ella.
En el caso de Grace Kelly no sé si hubo tanto braguetazo por parte de ella. Yo he leído que Rainiero quería casarse con una actriz de Hollywod que hiciera de reclamo a los actores de Hollywod que fueron los que pusieron Mónaco en el mapa. También exigio a su suegro el señor Kelly una dote de doa millones y medio de dolares y la confirmación de que Grace podía tener hijos.
Raniero estaba arruinado. Fue Onassis el que dijo al príncipe que se casara con una actriz de hollywood para reactivar el principado y situarlo como destino de millonarios y actores. Tenía que ser católica y Grace fue la elegida.
Lo que no entiendo es por qué acepto ella la verdad.
Máxima de Holanda, Mette Marit, Letizia, Mary de Dinamarca, los maridos de Victoria y Magdalena de Suecia, Kata de Inglaterra...A esta última la nacieron ya pretendienta a reina consorte.
Lee “Radziwill” tenía muy mala entraña. Murió millonaria y en su testamento no le dejó un centavo a la viuda de su hijo, quien lo cuidó con devoción hasta lo último (tenía cáncer).
Leí este verano su biografía (no autorizada), y la escritora le hizo un retrato brutal.
Al parecer, tuvo dos hijos solamente para asegurarse las espaldas económicamente, pues pensaba que su segundo marido tenía más dinero del que era en realidad. Se metía con su hija porque no le daba importancia a la imagen física y al peso.
Como era adicta al alcohol, y lo mezclaba con pastillas, llegó un momento en el que los hijos se tuvieron que ir a vivir con su tía Jackie al apartamento que tenía cerca de donde también vivía Lee.
Pensaba que Onassis iba a casarse con ella, después de ser su amante durante varios años, pero el griego eligió finalmente a Jackie. "No sé cómo ha podido hacerme esto mi propia hermana" decía.
A pesar de que tenía bastantes amigos gays: Andy Warhol, Nureyev, Truman Capote... era homófoba, y solía hablar de ellos despectivamente. Hizo el amago de contratar a Billy Baldwin (un famoso interiorista que había trabajado para su hermana en la casa de Skorpios) para renovar su piso en la Quinta Avenida. El caso es que finalmente no lo contrató, pero copió todas las ideas que él le había dado. Baldwin iba a contar este episodio en su autobiografía, pero Lee amenazó con demandarle a través de un amigo común de ambos: "Dile a ese pequeño mari**n que le denunciaré como publique esa historia".
Ya casada con Herbert Ross, el director de cine, tuvo problemas con el equipo de Magnolias de acero, incluyendo a las actrices. Hizo cambiar los muebles de la casa en la que estaban alojados, y cambiarse a una propiedad más grande. También exigió que fuesen a comprar caviar ruso a una tienda que estaba a una hora del lugar, todo a cargo del dinero de la producción.
Estuvo muy enamorada de Peter Beard, pero como no tenía suficiente dinero para sus estándares; le dejó. Más tarde él contaría que, cuando estaba en sociedad, era una mujer pretenciosa e insoportable.
Cuando Jackie muere, no le dejó nada en el testamento, especificando que ya le había dado bastante en vida. Fue como la última bofetada.
En el caso de Grace Kelly no sé si hubo tanto braguetazo por parte de ella. Yo he leído que Rainiero quería casarse con una actriz de Hollywod que hiciera de reclamo a los actores de Hollywod que fueron los que pusieron Mónaco en el mapa. También exigio a su suegro el señor Kelly una dote de doa millones y medio de dolares y la confirmación de que Grace podía tener hijos.
No sé si será verdad, pero se insinuó que conoció al Barón siendo ella prost*t*ta de lujo. Vamos, tipo las cenas de María de Mora, pero en plan multimillonarios.
Siempre contó que se conocieron en una fiesta por amigos comunes, aunque a mí nunca me ha encajado:
¿Una ex Miss España, recién divorciada de Espartaco Santoni y haciendo pelis cutres, codeándose con la jet europea? No me cuadra.
No sé si será verdad, pero se insinuó que conoció al Barón siendo ella prost*t*ta de lujo. Vamos, tipo las cenas de María de Mora, pero en plan multimillonarios.
Siempre contó que se conocieron en una fiesta por amigos comunes, aunque a mí nunca me ha encajado:
¿Una ex Miss España, recién divorciada de Espartaco Santoni y haciendo pelis cutres, condeándose con la jet europea? No me cuadra.
Lo que escuché decir a Carmen es que una amiga le dijo de ir a una fiesta, creo que en un barco, y que ella, deprimida por lo ocurrido con Santoni, no tenía ganas pero su madre insistió (para que se animara) y al final fue.