Los Mossos d'Esquadra investigan la desaparición de Kaoutar Elfalak, una mujer marroquí de 23 años, que vive entre Manresa y Súria, en la comarca del Bages (Barcelona), y que desde el pasado 26 de agosto, hace más de una semana, está desaparecida y nadie sabe nada de ella. Su marido, también de nacionalidad marroquí, de 28 años, presentó la denuncia en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Manresa para explicar que su esposa había desaparecido después de salir de la casa de su hermana. Desde entonces, no se ha sabido nada más. El hombre, además de presentar la denuncia a los Mossos d'Esquadra, que investigan los hechos, también ha publicado imágenes de la mujer con el objetivo de conseguir la colaboración ciudadana para poder localizarla.
La mujer solo habla árabe, según ha explicado su marido a ElCaso.com, y no conoce la zona. Lo que inquieta más de esta desaparición, que la familia asegura que no es voluntaria, es la posibilidad de que la mujer sea víctima de brujería, una práctica que, aunque está prohibida en la religión islámica, algunas personas la practican. En el año 2023, ya sufrió un episodio de violencia, fruto también, asegura su marido, de esta supuesta brujería. Sea como sea, la última imagen que tienen de ella es la de las cámaras de seguridad del vestíbulo de la casa de Manresa, donde hace dos meses que están instaladas y donde también vive la hermana del hombre. El último día que fue vista, se fue de casa sin ninguna de sus pertenencias: ni llaves, ni bolsa con ropa, ni tampoco dinero.
La familia la ha estado buscando en hospitales y también en los alrededores de la casa de Súria, donde habían vivido, y también de Manresa, donde vivían ahora y de donde había salido, pero sin suerte. Un testigo, que ya ha sido escuchado por los Mossos, asegura que la vio con dos chicos marroquíes, dos personas que viven de ocupas en un piso de la calle del Cos, número 9, en el centro de Manresa. Los Mossos d'Esquadra, por ahora, evitan dar detalles de la investigación, pero mantienen abierta la búsqueda de la mujer, que aunque aún no califican de riesgo, fuentes de la investigación aseguran que es inquietante. Se trata de una mujer extranjera, sin ningún vínculo con personas del país más allá de su familia más cercana y que no habla ni catalán ni castellano.
elcaso.elnacional.cat
La mujer solo habla árabe, según ha explicado su marido a ElCaso.com, y no conoce la zona. Lo que inquieta más de esta desaparición, que la familia asegura que no es voluntaria, es la posibilidad de que la mujer sea víctima de brujería, una práctica que, aunque está prohibida en la religión islámica, algunas personas la practican. En el año 2023, ya sufrió un episodio de violencia, fruto también, asegura su marido, de esta supuesta brujería. Sea como sea, la última imagen que tienen de ella es la de las cámaras de seguridad del vestíbulo de la casa de Manresa, donde hace dos meses que están instaladas y donde también vive la hermana del hombre. El último día que fue vista, se fue de casa sin ninguna de sus pertenencias: ni llaves, ni bolsa con ropa, ni tampoco dinero.
La familia la ha estado buscando en hospitales y también en los alrededores de la casa de Súria, donde habían vivido, y también de Manresa, donde vivían ahora y de donde había salido, pero sin suerte. Un testigo, que ya ha sido escuchado por los Mossos, asegura que la vio con dos chicos marroquíes, dos personas que viven de ocupas en un piso de la calle del Cos, número 9, en el centro de Manresa. Los Mossos d'Esquadra, por ahora, evitan dar detalles de la investigación, pero mantienen abierta la búsqueda de la mujer, que aunque aún no califican de riesgo, fuentes de la investigación aseguran que es inquietante. Se trata de una mujer extranjera, sin ningún vínculo con personas del país más allá de su familia más cercana y que no habla ni catalán ni castellano.
La extraña desaparición de una chica de 23 años en Manresa: rituales de brujería y vista en una casa ocupada
Los Mossos d'Esquadra investigan la desaparición de Kaoutar Elfalak, una mujer marroquí de 23 años, que vive entre Manresa y Súria, en la comarca del Bages.
elcaso.elnacional.cat
