Inés Bilbao y Beatriz Moreno cancelan su boda a dos meses de su gran día

[Barba Azul]

No entiendo nada, se las veía siempre felices y sonrientes, con mucha química y llenas de vida.

Un beso a las dos, ánimo, todo se pasa, pero es duro, mucho.

Ánimo guapas!

Inés Bilbao y Beatriz Moreno cancelan su boda a dos meses de su gran día

El enlace iba a celebrarse el 31 de agosto en la casa familiar de la familia Bilbao-de la Cierva en Sanlúcar de Barrameda

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Inés Bilbao y Beatriz Moreno cancelan su boda a dos meses de su gran día​

El enlace iba a celebrarse el 31 de agosto en la casa familiar de la familia Bilbao-de la Cierva en Sanlúcar de Barrameda​

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¡HOLA!
11 de julio de 2024 - 13:56 CEST
Hace seis meses, Inés y Beatriz hicieron oficial su relación con el anuncio de su boda. Lo hicieron a través de redes sociales y con toda la alegría y la ilusión de compartir ante su familia, sus amigos y el mundo entero que estaban profundamente enamoradas y felices de darse el 'sí, quiero'. La fecha estaba fijada para el 31 de agosto, los preparativos ya habían comenzado... pero han tomado la decisión, desde el cariño y el respeto no seguir adelante con la boda. La cancelan y rompen su noviazgo de mas de 4 años, pero seguras de que mantendrán la amistad y el cariño que las ha unido todo este tiempo.

© @inessbilbao
A finales del año pasado, Inés Bilbao le pidió matrimonio a su pareja, Beatriz Moreno. En esta imagen aparecen muy sonrientes mientras enseñan el anillo de pedida.
Inés desciende de una familia en la que las vinculaciones nobles y los apellidos más que conocidos son toda una constante. Nieta de Ymelda Moreno y Arteaga, marquesa de Poza y miembro de la Real Academia de Gastronomía, su madre es la conocida periodista Teresa de la Cierva y sus tíos, Gonzalo de la Cierva y Patricia Olmedilla, duques de Terranova. Además, otra de sus tías, Fátima de la Cierva, estuvo casada con el fallecido marqués de Griñón. Sus primos son, por tanto, Duarte y Aldara Falcó, hermanos pequeños de Tamara Falcó. Inés también es prima de Teresa Urquijo y sobrina de Teresa Moreno y Borbón.

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De hecho, Inés y Beatriz acudieron juntas a la boda del alcalde José Luis Martínez Almeida el pasado 6 de abril en un momento en el que aún pensaban que la siguiente boda de la familia sería la suya.
Todas estas personalidades estaban sin duda llamadas a reunirse en esta boda que se iba a celebrar el 31 de agosto en la casa familiar de la familia Bilbao- de la Cierva en Sanlúcar de Barrameda y que prometía ser una de las más divertidas del final del verano. Pero como decían los padres en el mensaje a sus invitados: “Ha sido una decisión valiente y difícil de tomar para ellas pero seguro que será lo mejor para las dos”.

 

[Barba Azul]

La nueva etapa de Inés Bilbao de la Cierva: “Todo gira en torno al amor en mi vida”

Además de trabajar en una agencia de publicidad y ser socia en una firma de moda, se encarga de poner música en los eventos más top del momento.

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La nueva etapa de Inés Bilbao de la Cierva: “Todo gira en torno al amor en mi vida”​

Además de trabajar en una agencia de publicidad y ser socia en una firma de moda, se encarga de poner música en los eventos más top del momento.
Por Nuria Hernández
2 de septiembre de 2024

Inés Bilbao de la CiervaCarlos de Lucas


Cuando tenía 21 años, Inés Bilbao de la Cierva (Madrid, 1996) puso tierra de por medio y emprendió un viaje que le cambiaría la vida. “Tuve una época en la que no me encontraba y me rebelé contra mis padres. Me fui 10 días sola a Colombia con una libreta, una cámara de fotos y una mochila. Pude conectar conmigo misma, leer y escribir mucho. Fue el viaje más especial de mi vida”, nos explica la joven, que reconoce ser inconformista y se obstina en asumir siempre nuevos retos. Es hija del experto en banca de inversión Mikel Bilbao y de la periodista de belleza Teresa de la Cierva, pero ni las finanzas ni el periodismo están en su punto de mira (estudió Publicidad en la Universidad Villanueva) y la música es una de sus grandes pasiones. “Empecé pinchando a los 17 años porque me flipa la música. Me compré una mesa de mezclas pequeña y aprendí con tutoriales de YouTube. Cuando vi que no se me daba demasiado bien, lo abandoné. En la pandemia me compré una mesa de mezclas mejor y retomé la afición. Empecé a pinchar en fiestas de amigos, vi lo que le divertía a la gente mi música… ¡y me vine arriba!”, ríe.
A partir de ahí la llamaron para trabajar en algunas discotecas como Café Berlín y la quisieron fichar en Lula Club (una de las salas más exclusivas de la capital), pero el mundo de la noche no le atraía. “Me forzaba a salir hasta las cuatro de la madrugada porque me tocaba pinchar desde esa hora hasta las seis de la mañana. No era mi sitio. Fue ahí donde comencé a pinchar en eventos de marcas de lujo que, aparte de que me pagan el doble, no trabajo de noche”, explica con naturalidad. “¡A mis familiares les horroriza la música que pongo! Dicen que no saben cómo bailarla. Ahora he virado hacia la música más comercial y puedo poner a mi madre a bailar Mamma Mia con una base de house. ¡Ha sido todo un reto para mí!”, dice mientras suelta una carcajada.

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La inquietud y la pasión con las que Inés vive su día a día la llevó en 2017 a embarcarse en un nuevo negocio del que sabía poco o nada: una firma de moda masculina llamada Cloking. “Surge por el marido de mi hermana Ymelda [Borja Mesa-Jareño], que decía que no encontraba ropa bonita que fuera asequible. Dicen que no hay que juntar familia, amigos y negocios, y él lo juntó todo. Los fines de semana los pasábamos visitando fábricas y después de nuestros trabajos nos poníamos hasta las tres de la mañana a ver qué hacíamos con Cloking. Pero ha valido la pena. Ahora tenemos cinco tiendas y 40 personas en plantilla”.
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Aunque muchos aseguran que trabajar con la familia es algo fabuloso, Inés se sincera al hablarnos sobre cómo influyó esto en la relación con su hermana. “Tuve un momento de crisis y pensé en dejar la empresa por lo que estaba suponiendo en la relación con ella. Siempre ha sido mi mejor amiga y cuando empezamos con el negocio me di cuenta de que solo hablábamos de trabajo y no nos sentábamos ya a contarnos nuestras cosas. Alguna vez yo flaqueaba y me echaba una bronca brutal. Hubo un momento que yo no quería ni verla. Nos distanciamos y lo pasé fatal. Con el tiempo y la madurez, aunque sigue siendo raro porque el trabajo siempre sale a la luz, hemos aprendido a manejarlo y tenemos una relación increíble otra vez”.

Inés Bilbao nos abre su álbum personal con esta foto de su infancia con sus padres y hermanos.
Álbum personal/D.R.
El apoyo de sus padres (“Mi madre, más que mi madre, es más mi mejor amiga”, dice) siempre ha sido clave para Inés, pero también la figura de su abuela materna, Ymelda Moreno y Arteaga, marquesa de Poza y miembro de la Real Academia de Gastronomía. “Es mi mayor aspiración. Se quedó viuda muy joven con cinco hijos, estudió Periodismo en una época en la que pocas mujeres lo hacían. Me encanta que me hable de nuestros orígenes [su familia desciende de Juan de la Cierva, inventor del autogiro, y del Gran Capitán, aristócrata al servicio de los Reyes Católicos]. A pesar de ser de otra generación, cuando salí del armario, mi abuela fue de las primeras personas que me apoyó y estuvo a mi lado. Está por encima de lo que puedan pensar, es muy independiente y liberal. La quiero como a mi vida”, dice emocionada.

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Ese momento para Inés no fue fácil. “No sé si es más fácil salir del armario habiendo nacido en un ambiente como el de la alta sociedad, pero es verdad que cuando empecé a ver lo que me estaba pasando no conocía a nadie de mi entorno que hubiera pasado por lo mismo, no tenía referentes, quizá por el lugar y las familias donde nací. Pero cuando vi que me apoyaban y me entendían, fue más fácil. Ha sido un proceso largo y complicado, pero no cambiaría ni un minuto de ese camino porque por eso hoy soy quien soy. Ahora vivo de manera natural y abierta. Tengo a la mejor familia y a los mejores amigos, nunca me he sentido ni juzgada ni apartada”, recalca. El otoño está al caer y se plantea esta temporada como todo en su vida: como un nuevo reto. “Soy un poco cabra loca, cuando veo que estoy estable en algo, quiero ir a por algo nuevo”. Además, afronta una nueva etapa vital soltera tras la repentina cancelación de su boda, que iba a celebrarse el 31 de agosto, aunque no quiere entrar en detalles. “Para mí el amor es infinito. Todo gira en torno al amor en mi vida”, concluye.

Inés Bilbao junto a su madre Teresa de la Cierva.
Álbum personal/D.R.
Una buena mezcla: moda y música
“Cada vez más marcas y eventos, como bodas, piden más mujeres DJ. Las que conozco son muy buenas y trabajan muchísimo. Me gustan más las mujeres que pinchan porque aspiro a parecerme a ellas. Soy muy fan de la DJ y productora italiana Deborah De Luca o de la coreana Peggy Gou”, nos cuenta Inés Bilbao, que revela que todo lo que ha aprendido sobre ese sector ha sido de manera autodidacta. Ella lleva ya un par de años poniendo música en eventos de grandes firmas de lujo como Adidas, Longchamp o Chaumet. “El primer evento potente en el que pinché y que me abrió las puertas fue uno que organizó Gala González para su marca de moda Amlul. El más importante en el que me han contratado ha sido para pinchar tres días para Cartier en el hotel Villamagna. Desde entonces han empezado a conocerme muchas marcas de lujo, que es en lo que me he especializado”.