Como era de esperar, Harry y Meghan están intentando evitar cualquier responsabilidad por este viaje excluyendo a los medios externos tanto como sea posible. Esto ejemplifica lo que la pareja siempre quiso, no privacidad sino control. No son defensores de la transparencia sino del subterfugio. Quieren la estética de Instagram, como Meghan dijo tan claramente durante su serie de Netflix. Se trata de mostrar la imagen perfecta, mientras se enmascaran las verdaderas intenciones. Hasta donde sabemos, esta visita se realizó sin medios externos, y el hecho de que la vicepresidenta de Colombia esté de acuerdo con ella refleja su complicidad en sus tácticas.
Crédito: Archewell/Sussex.com
La vicepresidenta no sabe ni donde está parada..siempre es así, siempre cree q la están agrediendo por su color de piel