Este es otro caso que se cargó la UCO, y van... Lo conozco bien, y hace muchos años que lo sigo. Estuve en el lugar del crimen, recorrí toda la ruta que realizó Sheila esa noche, he hablado con algún periodista que siguió el caso desde el principio, he intentado recopilar toda la información que se hizo pública... Yo opino que los detectives hicieron lo mismo que han hecho en otros casos (el de Dolores Vázquez, el reciente de Almonte, y alguno más), se tiran unos cuantos meses investigando, y cuando no encuentran nada, en vez de reconocer que no pueden resolver el caso, deciden "resolverlo", faltaría más. De todos los sospechosos, ¿cuál es el más sospechoso? Este. Pues este tiene que ser el culpable, y se construye un caso envolviéndolo, con dos elementos esenciales:
1) Se le da gran importancia, que semanas antes no tenía, a pruebas o indicios contra el sospechoso. Se ocultan los datos que le favorecen, o que podrían señalar hacia otros sospechosos.
2) Se establecen fuertes lazos con los familiares de las víctimas, aprovechando su vulnerabilidad emocional, para utilizarlos como munición contra el acusado.
¿Os acordais de Alicia Hornos? Pues la madre de Sheila y el resto de la familia están convencidos de que el sospechoso es culpable, aunque no lo conocían antes del crimen. Lo peor de este caso es el móvil alegado contra el sospechoso, que resulta tan ridículo, tan manifiestamente inventado, que ni siquiera la familia de Sheila se lo creyó, aunque el que ellos proponen tampoco parece muy fuerte.
La tragedia es que hay dos rastros de ADN que no se sabe a quien pertenecen, y nadie los investiga. Se hicieron pruebas de ADN a 10 personas, los más allegados y conocidos de Sheila, y posteriormente (y a instancias de la familia, que la GC no lo pidió) a dos testigos de última hora, y ninguno resultó positivo.
El sentido común indica que se debería ampliar el rango de sospechosos, comparando su ADN con el hallado, pero no se hace. La Guardia Civil no lo va a hacer, ya que de hallarse una coincidencia debilitaría su caso contra el sospechoso. La familia tampoco, por la misma razón. Y el ADN sin analizar. Una coincidencia de no significaría de forma automática que sea culpable, tal vez haya una explicación inocente, pero si no se hacen pruebas, nunca se sabrá.
Y se acerca, cada vez queda menos, la prescripción.