La imagen de esos chicos llevando a hombros a su amigo me ha calado muy hondo.


Los chicos de hoy en día serán o actuarán de peculiares maneras,pero qué difícil debe de estar siendo para ellos haber despedido a su amigo de sólo 18 años. Me han dado una ternura y pena increíble. Ah,rezo por no verme jamás en una situación ni un POQUITO de parecida a lo que es perder un hijo,pero yo le hubiera puesto 20 coches fúnebres llenos de flores si hace falta. Es una despedida eterna por desgracia,LO QUE HAGA FALTA. Me despido de éste hilo,Álvaro ya descansa en paz. Ojalá esos padres encuentren consuelo.