No puedo decir mucho sobre las actuaciones de Leonor, excepto aquel día en que Letizia, como una barriobajera, le armó un escándalo a la Reina Sofía. Leonor, como autómata, se quitó la mano de su abuela del hombro, obedeciendo a su madre. No se le puede achacar esta falta de respeto a la entonces niña al cien por ciento, aunque pienso que lo más indicado, como hija y luego como nieta, sería no tomar ninguna acción.
Luego, este verano en Palma, salieron a pasear con 38 grados. Cuando Letizia entró en una tienda, las dos hijas la siguieron corriendo y se desentendieron de la abuela, que casi se cae.
En ambas ocasiones, y desde que Leonor tiene más exposición pública, noto que la hija no toma actitudes independientes y trata de no contradecir a su madre, independientemente de las circunstancias. Por ejemplo, si una madre hace un drama en público, normalmente las hijas, disimuladamente, la ponen en su lugar y le dicen: “Cálmate, no es para tanto, no exageres, por favor compórtate, acabamos de llegar.” O, en mi caso, sería algo como: “Mamá, no exageres, la lluvia no te está cayendo encima como a los que están desfilando. Deja el drama.”
La veo fisicamante Borbon, pero su actitud y ademanes muy Leticia y muy pendiente de actuar como su madre quiere que actue y secundandola en todo.