Pues eso, soy de una familia numerosa y al año tengo que hacer sumando cumpleaños, santos y reyes en torno a unos 27 regalos. Esto es un despropósito, y éste año me he cansado por que es que estoy hasta las pelotas, en mayo el día de la madre, julio cumpleaños de mi hermana y santo de mi madre, en agosto el cumpleaños de mi hermano, en octubre más cumpleaños y luego encadenamos con las navidades.
Siento que me paso el año mirando regalos y comiéndome la cabeza y sobre todo dejándome dinero en detalles absurdos. A mí me gustaría juntar a mi familia más cercana en plan padres y hermanos y decirles, oye, mirad, en navidad cogemos y hacemos el amigo invisible, que así compramos un regalo cada uno y ya está. Pero claro, es que es imposible por que no quieren, dicen mis cuñadas que se meten donde no las llama nadie que como hay niños pequeños pues claro que se darían cuenta de que no hay reyes magos ni papá Noel. Que cuando sean mayores pues que a lo mejor, pero que de momento lo bonito es que los niños se levanten y vean el árbol a reventar de regalos, son unas materialistas de mierda que lo único que quieren es subir la foto a instagram que queda muy feo eso de estar cenando e intercambiarse los regalos.
Casualmente las personas que más quejas ponen son las que tienen hijos y las que NUNCA regalan nada, vamos que si sus hijos ven el árbol a reventar de regalos es por que lo llenamos los demás. En la vida han traído mi cuñada y mi hermano una mísera caja de bombones a mi madre, que a mí me la suda, pero ya que se pasa las vacaciones en navidad, semana santa y verano viviendo aquí del cuento qué menos que oye, pues un detalle. Como vienen de fuera se deben de pensar que nos regalan su presencia.
Ya el año pasado compré regalos solo en reyes y en papá noel hice detalles a mano en plan monederos o cosas de decoración pero claro a lo mejor hacer tantísimos detalles a mano me llevó dos tardes, y acabé también hasta las narices.
A mí me parece una locura este ritmo, ya no económicamente, que también, por que yo hace dos años establecí un límite económico para cada uno para que no hubiera desigualdades, si no por que es que llega un momento en el que no sabes qué comprar.
He probado de todo, cuando fue el santo de mi madre y el cumpleaños de mi madre que es bastante seguido, junté a mis hermanos y les dije, oye por que en vez de hacer un regalo cada uno por cada día, que serían 8 regalos, no juntamos dinero y hacemos un buen regalo? Por que yo considero que no solo puede salir más barato si no que se pueden regalar cosas más prácticas. No es lo mismo poner 20€ cada uno y juntar 100€ que a lo mejor gastar 20€ por separado que hoy en día con 20€ no haces nada y al final termina la persona con la casa llena de tonterías. No hubo forma, unos empezaron a decir que es que ya lo tenían mirado de hace tiempo, otros que es que no se querían gastar tanto...ay a mí me agobia y desespera a partes iguales.
Cómo hacéis vosotras para gestionar eso? Yo hasta ahora miraba para otro lado por que total, entre que "un cumpleaños es un cumpleaños" y que "las navidades son para disfrutar" pues no lo pensaba pero claro, el otro día me puse a pensar en el tema y me di cuenta de que con la mitad del dinero que me gasto en regalos a lo mejor me iba un fin de semana con mi novio y ya me ha dejado de hacer gracia.
Salvo dos sobrinos de 4 y 7 años, y una adolescente de 16, los demás pasamos todos los 25, creo que no es necesario que todos tengamos 6 regalos bajo el árbol todas las navidades vaya, ni 6 regalos de cumpleaños, ni 6 regalos de santo, sobre todo por que mi santo y el de mi padre si se celebran pero el del resto de mis hermanos como son nombres menos conocidos que como no son fiesta pues no se hacen.
Edito para decir, que lo que me da pena es que algo que se tenía que hacer con ilusión, al final termina siendo un compromiso y acabas en navidades como pollo sin cabeza recorriéndote todos los centros comerciales y echando más horas en amazon que un reloj para poder tener algo que poner en el arbol familiar. Aunque sepas que la persona no lo va a usar, pero algo tienes que llevar.
Y es que este cansancio lo he notado también en mi madre, que con ella tengo mucha confianza y ya el año pasado acabamos las dos hasta las narices del tema de los regalos. Y el otro día salió el tema y la vi cansada de las navidades antes de empezar. Cuando en mi casa hasta que se montó todo este nivel de regalos, las navidades se recibían con muchísima ilusión y muchas ganas.