A saber qué ha pasado realmente. Puede que sea real, o bien que haya sido una venganza por parte de esa chica al haberla despedido por su comportamiento.
Ahora, no digo que necesariamente sea el caso de Nacho Cano, pero las persecuciones políticas existen.
Recuerdo cómo Pedro Ruíz contó que, en la época en la que María Antonia Iglesias dirigía los informativos de la cadena pública, hablaban constantemente de su deuda con hacienda. Todo porque él había sido crítico con el gobierno de Felipe González (con todo lo que saquearon ellos de las arcas públicas).
Bárbara Rey dijo que, después de apoyar a UCD, la vetaron en televisión, porque Adolfo Suárez quería dar una imagen más "progre". José Feliciano igual, que también apoyó esa campaña.