En la prensa se cansaron de decir que lo hablaba desde la cuna, que en la casa con su madre hablaban español, que contrataban niñeras argentinas especialmente para ese fin, que todos los detalles argentinos que tenía presente Máxima hasta en la decoración de la casa con mates en las pinturas de la pared, lis añfajores de maicena y bla bla bla . Todas pensamos que era bilingüe perfecta de cuna y que tenía la misma facilidad en español que en holandés, resulta que no. Como Leonor viendo pelis de Kurosawa a los diez años, lo mismo.