Yo me acuerdo que se vendían pisos interiores a unos precios de escándalo. Y efectivamente una urbanización que estaba prevista a las afueras y solo se construyeron dos edificios , quedó un espanto en la nada.
Esos barrios y localidades con un bloque soviético en mitad de un descampado...que daño a la vista.
O las zonas con chalets a medio hacer, abandonados en plena obra, que más tarde serían cobijos de okupas y gente de mal vivir.
El norte de Toledo, la Sagra en concreto, está petado de estos horrores, Madrid tiene también sus sitios horrendos en barrios y localidades, especialmente las más burbujeadas (el sur de Madrid por ejemplo), pero lo que se ve por Toledo es escalofriante. Me han dicho que en Levante estos sitios abundan por la provincia de Alicante, en Elda que ha sido más industrial, se ven bastante estos horrores, yo es que por ahí he pasado pero no me he quedado a comprobarlo. Unos amigos son de esa zona levantina y allí se pasaron con la construcción dejando monstruosidades a medio hacer, y vendiendo pisos y casas a precios locos de solemnidad.
No se qué zonas de Barcelona o del norte de España tienen su equivalente al terrorífico y altamente explotado en ladrillo, Toledo, y de toda la provincia, es la Sagra la que peor fama se lleva, junto con Seseña. Tampoco se queda atrás la zona toledana cercana a la Vega madrileña, donde se cruza Aranjuez con Borox, Seseña, el horror absoluto aquello que hizo el Pocero. No ha pasado de forma tan bestia en zonas como Guadalajara, o Segovia o Ávila (que las habrá fijisimo), pero el destroce con Toledo fue épico, sin dejarme la ruina mastodóntica que hicieron de Talavera de la Reina, que pudo haber sido un sitio muy top, hasta con categoría histórica, que la tiene. La burbuja se cargó Talavera, era ir antes de la burbuja y parecía que iba a recobrar el esplendor de su pasado, después del crack, la destrozaron, irreconocible. Yo conocí a un ex albañil de Talavera y lo que me contaba de lo que llegó a ganar ponía los pelos de punta, lo que no ganaba ni un médico, unas 700.000 pesetas (más de 4000 euros al mes por poner ladrillos).
He pasado por estos sitios y me ha dado hasta miedo. No se me olvidará una vez que tuve que estar en la Sagra toledana en plena noche para recoger a un familiar que fue a visitar a unas amistades, en una urbanizacion con los chalets de en frente a abandonados, y entre la carretera secundaria y esas casas, vamos, para hacer un Cuarto Milenio. Esta comarca la conozco y es que vaya destrozos visuales se ven.
Y no es uno, es que raro es el pueblo de la Sagra o Toledo norte que no tiene algo así de abandono por burbuja.
Lo que pasó en la Sagra y el norte de Toledo es que la gente del sur de Madrid se empezó a ir en masa a esos sitios y a los constructores se les fue la olla ideando y construyendo sin parar. Eran todo grúas, chalets en medio de la nada en un punto en mitad del paisaje, horrores visuales, acceso malo, servicios malos, pero ojo era "el chalet". Por la carretera se veían fábricas de ladrillo, yeserías, todo polígonos dedicados a cosas de la construcción, si es que parecía que no había otra cosa más que ladrillo.