No estoy muy bien, con mucha ansiedad. Creo que esto no es normal y creo que es como un vicio que sé que no me hace bien pero vuelvo. Me vais a matar a aspas pero no quería contarlo ya que es el mismo bucle vicioso.
Cuando volví de España recogí todas mis cosas, la mitad se las llevó mi compañera y consigue una habitación no muy lejos del trabajo, estaba decidida a irme y liberada de mis miedos o eso pensaba , al ver que había conseguido donde irme tan rápido y mis maletas preparadas en la puerta, me volvió a pedir perdón, lloramos los dos, me prometió que las cosas cambiarían, que cambiaría de trabajo que le diera un mes y que limitaría su relación con su jefa. Me pido perdón y le creí una vez más como buena entupida que soy. Me quede pero yo no estaba bien ni feliz, estaba muy herida y volvimos a discutir por una tontería y esta vez fue el quien me pidió el divorcio y me volvió a culpar de todos los problemas, me culpó y me echó en cara cosas que no tienen ningún sentido, volvió a decirme que no confiaba en mí y todo porque hace meses cuando llegó una noche sin avisar a las 3 y me dejó de hablar durante unos días vi el percal muy negro y decidí actuar, os dije que abrí mi propia cuenta, pues también me culpó de dejarlo en la mierda al no dejar las cuentas en común cuando el gana más que yo. Me culpo de mis reacciones y que no sabía mantener un diálogo, que no le dejaba ser libre y que se sentía agobiado, que no era feliz, todo esto me lo dijo llorando para hacerme sentir más miserable. Para el todo esto es una falta de respeto y no confía en mí por decidir ser independiente con mi maldito dinero, no confía en mí por mis reacciones porque grito. Aunque luego me dijo “ a mí el dinero me da igual es lo de menos como si quieres quédate con el apartamento de España”.
Siento decepcionaros, ya ni me conozco, me he anulado a mi misma sin necesidad ninguna.
He empezado a tomar pastillas para dormir y espero salir de esto, pero cuando estaba decidida a irme, encontré un sitio donde vivir y había organizado todo, el hdp una vez más me arrastra a el para luego seguir martirizándome.
