Anécdota reciente que involucra Whatsapp, a lo mejor va en otro hilo. VIENE TOCHO.
Le escribo a un compañero de trabajo, con el que tenía confianza, vía Whatsapp, a ver cuál era correo electrónico para que un amigo enviase un CV , sin compromiso.
Aclaro que nunca pido favores, generalmente los resuelvo yo.
Casualidades de la vida, llevaba tiempo sin ver al compañero de trabajo, pero el mismo día que le escribo, me lo encuentro en la cafetería.
El tío móvil en mano, levanta la mirada y me vé. Se le pone una cara de incomodidad absoluta.
Yo saco mi móvil, en lo que lo veo.
Me dice que me estaba contestando en ese momento, que ahora no necesita a nadie, pero que le mande el CV igualmente, por si acaso.
Frente a frente, en mi cara me envía el correo electrónico por Whatsapp. Ambos con los móviles en la mano. Se va caminando para atrás, tal cual Michael Jackson.
Yo, veo la entrada de su mensaje y que su foto de perfil desaparece, en mis narices. Vuelvo a levantar la mirada y el hombre sigue caminando para atrás, en una huida literal.
Inmediatamente, borro el correo electrónico para "candidatos" y bloqueo al "compi".
Con lo bien que hubiese quedado el compañero sin bloquearme. ¿Qué necesidad tiene la gente de ser tan maleducada?. ¿Tan borde?
Se lo comento a mi hermano y me dice ya caerá el Moonwalker, dale 2 semanas.
Se quedó corto. A los 5 días, ya lo tenía detrás, necesitaba un favor, para un amigo, URGENTE.
Obviamente le dije que de eso se encargaría mi jefe, que yo no podía resolverlo.

(le había resuelto muchísimos marrones anteriormente)
A mí ya no podrá escribirme más, creo que ni llamarme. Qué pena

.
Se lo hubiese pensado mejor.