Genéticamente los mercheros son payos. Es decir, que no son gitanos sino que son muy españoles y mucho españoles y mucho blancos, más allá de que alguno pueda tener mezcla con gitanos. Cultural y sociológicamente son gitanos. Hablan como gitanos, viven como gitanos y se relacionan con gitanos. Son nuestros quiovalentes de los "travellers" en Reino Unido e Irlanda.
[ ISPOILER]Yo a los mercheros no los calificaría como payos, pues no lo son. Tienen tez más oscura, e incluso a los que tienen los ojos claros, se les nota ese aura marginal[/ISPOILER]
Sus costumbres son muy parecidas a las de los gitanos, pero no se pueden ver los unos a los otros...si hacen tratos porque no les queda otra, desconfían unos de otros Eso sí, todos se aprovechan de ayudas, subvenciones, y reinserciónes en la sociedad .. reinserción que no quieren
Los oros les pirran a ambos, y demostrar poder y dinero...si no lo hacen es para no llamar la atención respecto al dinero. Pero algunos no pueden evitarlo...tienen que llevar el ultimo modelo de alta gama
Los payos, así nos llaman...es un insulto para ellos
Se creen por encima Y los gitanos temen a los mercheros
Les gusta vivir cerca unos de otros...de hecho si alguno sale del guetto donde los suelen meter para estar controlados, rápidamente empiezan los familiares a comprar casas alrededor
Ya se están intentando integrar en la sociedad y trabajar, no porque les guste. Si no porque han aprendido que tienen que demostrar parte de la procedencia de su dinero
Raro es el que no tenga algún familiar en la cárcel
Y esto no es racismo, es la verdad, guste o no
Cualquiera que haya tenido contacto con ellos por trabajo o cualquier otra circunstancia, sabe que esto es así
La vivienda familiar de los encarcelados de San Lázaro por su implicación en el tiroteo de Plasencia en el que murió una niña de dos años ha sido quemada esta madrugada al segundo intento. Además se trató de prender fuego también a otras dos casas y tres vehículos resultados dañados, según informan fuentes policiales.
Pasadas las 13.30 de ayer se dio aviso al 112 de un incendio en una vivienda sita en la calle Calzada. Dos dotaciones del parque de bomberos de la ciudad se trasladaron hasta el lugar y el fuego se extinguió enseguida porque las puertas y ventanas de la casa estaban cerradas. De hecho, apenas una hora después la intervención de los bomberos había finalizado.
Sin embargo, otras dos dotaciones del parque placentino tuvieron que volver a la casa, porque recibieron un segundo aviso a las 1.40 de la madrugada. En esta ocasión el fuego había alcanzado por completo a toda la vivienda, «que antes sufrió daños vandálicos y presentaba agujeros de bala en la puerta de entrada y paredes», según detalla la Diputación de Cáceres en referencia a la actuación de los bomberos.
beros.
Los bomberos, durante las labores del extinción.
No obstante, aunque fue la única casa que se quemó, fuentes policiales indican que se trató de prender fuego a otras dos y que se ocasionaron daños materiales en tres vehículos propiedad también, supuestamente, de los miembros de la familia de San Lázaro para los que el juez ha decretado prisión provisional por su implicación en el tiroteo en el que murió una pequeña de dos años y que ha disparado la tensión en el barrio placentino. Es el motivo por el que policías del Grupo Operativo de Respuesta de Cáceres mantienen la vigilancia en San Lázaro, a pesar de que la vivienda quemada estaba vacía porque los familiares de los encarcelados ya han abandonado el barrio.
Estoy leyendo por encima y no me acabo de situar. Copio esto, no sé si está ya, pero es más o menos lo que comentáis.
Los delitos imputados por el momento a los detenidos, en base a la investigación policial en marcha y las declaraciones de hoy en sede judicial, que se han prolongado durante siete horas, aclaran en buena parte lo ocurrido la noche del sábado en el barrio placentino. Aunque aún no está el estudio de balística que se ha encargado, que determinará con exactitud qué armas se dispararon y la trayectoria de las balas, la no imputación de un delito de tenencia ilícita de armas a los miembros del clan de los Hilarios, unido al hecho de que no se han encontrado impacto de balas en la fachada de la vivienda de la familia de San Lázaro con la que mantenían la disputa, dejan entrever que no participaron en el tiroteo y que, por tanto, la «bala perdida» como la definió el padre de la menor fallecida no salió del coche de los Hilarios.
El coche acribillado
El pequeño del clan había mantenido dos días antes una disputa con un miembro de la familia de San Lázaro en el puticlub en el que éste trabajaba de portero cuando no le dejó acceder con alcohol ajeno al local. El portero recibió una paliza por eso, sus hermanos acudieron a pedir explicaciones a los Hilarios al día siguiente y el sábado por la noche el pequeño del clan de nuevo, Hilarín le llaman, se fue hasta San Lázaro después de haber estado bebiendo con hermanos y amigos durante todo el día en la barriada de Gabriel y Galán, donde residen.
Cuando su hermano, sus dos primos y el amigo payo se percataron de que no estaba, pensaron que podía haber ido a San Lázaro y decidieron acudir en su búsqueda para evitar un nuevo conflicto. Hilarín fue solo en un coche de color blanco que no llegó a entrar en el barrio. Sí lo hicieron en un Audi Q5 de color negro su hermano, dos primos y el amigo.
Supuestamente fueron hasta la vivienda en la que reside el portero del club de alterne con el que se había peleado, preguntaron por el pequeño del clan y al comprobar que no estaba decidieron marcharse. Pero los miembros de la familia de San Lázaro iniciaron un tiroteo que terminó con el Audi acribillado y al menos tres balas en el interior de la vivienda en la que se encontraba la menor de dos años.
El número total de detenidos por el tiroteo se ha elevado a once porque a los nueve que ya estaban se han sumado los dos primos de Hilarín, de 28 y 29 años, que también acudieron a San Lázaro en el Audi negro y que como ya hicieron los tres anteriores la tarde del domingo, finalmente decidieron entregarse esta mañana.