Es un tema que después de todos los años que lleva funcionando, me sigue resultando incomprensible. Mi opinión es que a casi nadie, si no es por motivos de promoción o trabajo, le interesaría utilizarlas.
En su origen, las redes sociales estaban enfocadas a adolescentes y jóvenes con intención de ligar. La mayoría tenían en mente a ciertas personas, tener visibilidad para contactar con alguien en concreto. Pero no se daban cuenta que se exponían a que mucha gente desconocida tuviera información sobre su vida, lo que suponía muchos peligros.
Más adelante, entre gente adulta, las redes se convirtieron en una plataforma de exposición social, alimentando las peores (y antiguas) costumbres de vivir para mantener una apariencia de vida ideal y perfecta.
Luego ( o quizás era el verdadero objeto de las redes sociales desde el principio), apareció la posibilidad de generar un beneficio económico convirtiéndose en influencer. Esto puede llevar un esfuerzo enorme en preparación y condicionar la vida de la persona por completo, siendo muy improbable que llegue a dar un beneficio claro. Todo el mundo ve a los pocos influencers y youtubers de éxito, pero hay una gran mayoría que lo único que hace es perder tiempo y dinero.
Detrás de todo hay un enorme negocio de unas pocas empresas que obtienen grandes beneficios sin arriesgar nada.
Con la plataforma que tienen para dar voz a estas estafas a saber a cuánta gente habrá llegado.