Es que es eso, si ya con el padre de tu hijo es difícil a veces ponerse de acuerdo en la crianza de un hijo, como no va a serlo con una persona ajena, que ve las cosas desde fuera. Sin contar la cantidad de problemas que puede llegar a dar tener que vivir con un hijo que no es tuyo, desde el consabido tu no eres mi padre/ madre hasta problemas con la otra parte por esos niños. Y es muy fácil decir es que si no es su padre/madre no tiene ni voz ni voto en lo referente a es@ niñ@, pero una vez que convives se supone que es porque quieres que forme parte de la familia, así que eso de que se quede al margen en lo que convenga pues más problemas.
Además está otra parte, que realmente se lleven bien y se quieran (los hijos y la pareja nueva) pero que la pareja no acabe bien y se separe. Hace poco leí un artículo de una mujer, que había criado a la hija de su marido, muchos años conviviendo, no tenía hijos propios, pues se acabaron separando y ella no tenía ningún derecho a ver a esa niña. Que lo entiendo, pero también hay que tener en cuenta que es muy difícil de asumir algo así, más aún para un niño. Creo que lo intentó llevar a juicio para conseguir derecho de visitas.
Por eso cuando hay niños se complica todo mucho y hay que tener en cuenta muchísimos factores, empezando por el bienestar de los niños, que efectivamente se les impone, la mayoría de las veces, alguien ajeno y sin poder decidir.