¡Qué agotamiento solo de leerlo!
Me parece que las no madres lo que les gustaría es un ratito
alguna vez, un año de estos, aunque solo sea un par de horas tomando un café, donde poder hablar tranquilamente de todo, sin interrupciones continuas. Un ratito para las confidencias de todo tipo, así que si el niño ya tiene unos años, igual no procede que esté delante, escuchando
Una agenda tan apretada, que ni un hueco libre tranquilo, me suena a que se sigue poniendo el foco en los nenes, que a ciertas edades se suben por las paredes en casa. Una vez agotados duermen como un lirón.
