Prima, el mundo administrativo, sanitario, judicial... no está preparado para el divorcio familiar. Puedes estar en contacto cero o mudarte a una isla desierta, pero si tienes un accidente y te quedas en coma, el hospital llamará a tus hermanos los machistas, tus hermanos los gilipollas, con los que llevas cuarenta años sin hablarte, para que decidan lo que hay que hacer contigo. Para que tomen el control de tus asuntos, las llaves de tu casa, los pagos de tus cuentas, y decidan en tu nombre.
Cuando yo fui consciente de esto, fui a un notario y firmé un documento dándole mi tutela, en caso de fuerza mayor, a un buen amigo mío que se ofreció. También me inscribí en el Registro de Últimas Voluntades, haciendo constar mis deseos en caso de incapacidad, muerte cerebral, etc. Pero aún así, tengo serias dudas de que a la hora de la verdad esto fuese a servir de algo, y si estás soltera y sin hijos, los que toman las decisiones son los parientes más próximos, te lleves como te lleves.
Te puedes divorciar de un marido, pero no de un hermano.