De acuerdo, por supuesto. Miguel nos dio mucho más de lo que nadie se atrevería a pedirle
Nanit
Esther López de la Rosa, desaparecida en Traspinedo. Aparece su cadáver.
- AutorYehonala
- Fecha de inicio
Nanit
Y que en Arroyo hay una calle que se llama Me Falta un Tornillo
Por si hay alguna duda yo jamas dejaria a nadie alli sola. Lo he dicho 384774 veces, me acusaran de detencion ilegal o no - que me descojono con esto-
Si se enfada, baja, va como las grecas o me da un bofeton, me da igual. Alli me quedo con las luces dadas y llamo a su familia o a algun amigo que la venga a buscar.
Que ella dejaria de hablarme? Seguramente. Que a mi me importaria una mierda? Pues tambien. Ante todo mis principios.
Pero respeto los de otros - aunque no me gusten-
Por si hay alguien que aun duda de algo de lo que digo, vaya
Pero que tú y todos por lo visto menos él.
Que has de dejar ir a una persona que quiere hacerlo en condiciones normales, por supuesto. Pero cuando las condiciones no son normales pues no debes.
Es casi como decir que si alguien se quiere tirar por un puente pues has de dejarlo porque es libre. Que más o menos es lo que hizo este individuo y a las pruebas me remito: Esther en el cementerio.
Y si finalmente la dejas ir y al día siguiente, bien sobrio y espabilado, cuando ya sabes que a casa no ha llegado y tiene el móvil apagado, lo que haría cualquier persona NORMAL sería mover el culo, no escaquearse de todo y cuando no tuvo más remedio convencer a la gente de que Esther estaba de fiesta, y así desde el Jueves hasta el Lunes.
Y ahora el pobre está hasta los huevos.
Pobre Óscar.
Y todo ocurre, esas ganas de "continuar la fiesta" de E, pues repentinas en cuestión de segundos "casualmente" DESPUÉS de bajarse Carolo del coche.
¡Qué casualidad!
Carolo en el coche: E* se va a dormir a casa de O.
Carolo se baja del coche: E* quiere fiesta.
¡Qué casualidaaaaaaaaaad!
La hermana de O declara que E estaba bien!!! En donde declara eso? Porque es bastante coherente que el declare que estuvieron fumando crack y la hermana de el diga que estaba bien. """. Parece ser que a la hermana entonces la viene de familia también contradecirse o las lagunas ""Yo sí, pone que está defraudado.
Pero si más que lo que la gente opine, es él mismo, él que debería estar cuanto menos arrepentido. No sé prima, que seré yo, que a mí me pasa eso, y a parte de que ahí no dejo ni la bolsa de la basura, sería yo mismo el que me mostrase como el defraudador al haberme llevado a una chica del pueblo viva, para que luego desapareciera y de ahí al cementerio.
Aun no teniendo culpa alguna Oscar a nivel legal, cosa que cada vez dudo más, sólo el hecho dejarla ahí con el desenlace que ha habido a la postre, es para cuanto menos lamentarse de lo que uno hizo en ese momento, pero en este caso no, aquí lamento por dejarla en la carretera ninguno, aquí resulta que él se ha quedado sin ligue, que no la buscó porque no se hablaba con Inés, y que el pueblo le ha defraudado a él.
Si ya me lo decía un amigo a mí, éste sólo mira por sí mismo, y mira razón tenía.
Pero vamos, nada nuevo bajo el Sol, que esta actitud la ha tenido insisto desde el día 13, nada que ver con el Óscar de antes. Nada. Y nada que ver seguramente a cómo se habría comportado si efectivamente no hubiera tenido nada que ver, ni él, ni nadie.
Pues nada Óscar majo, mi más sincera enhorabuena, y ya lo siento lo de la novieta, ya saldrá otra. A ver si se convoca un pleno y les convencemos para que pongan una calle en tu honor y por tu corrección , fiera.
Y ahora que caigo... "dice" me puedo quedar en tu casa que paso de ir a la mía así " ? Así cómo? Porque sabemos todos que su hermana, la hermana de Oscar, ha declarado que Esther estaba BIEN.
En fín,
..De todas maneras sin defender a nadie , me gustaría veros con una mujer de 35 años diciendo que te vayas de aquí , que me dejes en paz y a saber en qué estado de agresividad,. Me hubiera gustado ver cómo la coges en brazos la atas y te la llevas a casa
.. y sobre todo pensar que nadie se le pasa por la cabeza el desenlace del después y menos estando más que colocao y deseando tirarse en la cama... Pero cada cual es libre de pensar lo que quiera , yo desde luego pensaré que es un implicado en la muerte de E cuando se demuestre , mientras es más que ruin culparlo de abandono cuando aquí todos ven muy fácil coger a una mujer y hacer algo que a ella no le da la gana.- Registrado
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Haz lista de invitados así ya cunetas a ciencia cierta, manda la ubicación.
los guantes ya los llevamos puestos
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Habéis leído este artículo? Es de Noviembre del año pasado.
Un día cualquiera de una camionera y precisamente una de las noches la pasa en el parking de La Maña!
He puesto en negrita algunos detalles, entre ellos el de que a las 6 de la mañana los otros camiones ya se habían ido!
Por abrir otra hipótesis, podría algún camionero haber visto a Esther e intentado sobrepasarse con ella?
Si os fijáis la camionera dice que ella de noche no va al baño de ningún restaurante ni de ningún área de servicio, porque no es la primera vez que se lleva un susto por haberla confundido con una prost*t*ta.
INTERNACIONAL 29/11/2021
11 min
Montse Vila al volante del tráiler que conduce.
Es un restaurante de carretera, de esos donde se dice que se come bien porque siempre paran camioneros.
De hecho en el parking hay cinco tráileres aparcados, uno al lado de otro.
Está en el pequeño municipio de Traspinedo, en la provincia de Valladolid.
El nombre del restaurante se puede leer en la fachada: La Maña.
Está escrito con grandes letras blancas pero a estas horas apenas se ven porque hay poca luz en el exterior. Son las ocho de la tarde y ya hace rato que se ha hecho de noche.
“No sé si quedarme aquí. Este lugar no me gusta demasiado porque hay un coche abandonado”, reniega Montse Vila, mientras hace maniobras para aparcar el camión, un mastodonte de 12 ruedas y 17 metros de largo. Efectivamente, en un lateral del parking hay un vehículo destartalado. Aun así Montse para por fin el tráiler, corre la cortina de la cabina para que no la vean desde fuera y empieza el ritual de cada noche: se pone el pijama, coloca un pequeño hule sobre el salpicadero del vehículo para utilizarlo como mesa, saca un táper con comida de una nevera y la sirve sin calentar en un plato de cartón.
Antes de empezar a cenar, se fuma varios pitillos sin moverse de delante del volante mientras mira una película de Netflix en una pantalla que hay instalada estratégicamente encima del asiento del copiloto. No baja del vehículo para nada, ni va al restaurante a pesar de que está a escasos metros, ni tan siquiera al lavabo público. Orina en un cubo de basura que cierra con una tapadera para que no haga olor y donde coloca una doble bolsa para que no gotee. Por la noche también duerme dentro del camión, en una estrecha litera que hay justo detrás de los asientos.
Al lado del tráiler aparcan más tarde otros dos camiones de también grandes dimensiones. Uno de los camioneros, un hombre, sí que baja del vehículo y se dirige al restaurante. El otro, que tiene cara de latinoamericano, echa la cortina de la cabina y se queda dentro. “Los panchitos normalmente no bajan porque no quieren gastar dinero”, suelta Montse mirándolo de reojo. Habla así, sin filtros.
Montse Vila Andreu es de Deltebre, tiene 42 años y conduce un tráiler desde hace casi cinco. Es una de las poquísimas mujeres que se dedican a un oficio que en España está copado por hombres. Es autónoma y viaja donde haga falta. Normalmente está fuera de casa de lunes a viernes. Esta mañana salió de Tortosa con un cargamento de casi 5.600 kilos de gomas para neveras, y se dirige a Estarreja, en Portugal. Pero también hace viajes a Francia, Bélgica, Reino Unido y, por supuesto, a cualquier lugar de España. Sola, siempre sola.
Se hizo camionera porque su padre lo era aunque, admite, a él no le hubiera gustado que ella se dedicara a este oficio. “Decía que no era un trabajo para una mujer”. Y algo de razón tenía. Al menos no es lo mismo para una mujer que para un hombre.
Por la mañana Montse tampoco va a ningún lavabo público. Se lava la cara y los dientes con el agua helada de un depósito que hay en los bajos del camión y que tiene un pequeño grifo. “En verano, si puedo, me ducho cada día”, aclara. Pero en invierno hay que tener muchas ganas de lavarse para ducharse en una área de servicio en España. Según dice, es muy difícil que las duchas tengan calefacción, a menudo están sucias y en algunos casos están dentro del lavabo de los hombres. Así que ella prefiere limpiarse el cuerpo con “toallitas de viejecito”, como ella las llama. “Son mejores que las de bebé. Lo sé porque las he probado todas”.
Montse lavándose los dientes con el agua de un depósito que hay en los bajos del camión.
Montse no va a los lavabos púbicos ni a los restaurantes de las áreas de servicio, sobre todo de noche, porque dice que ya ha tenido varios sustos y en más de una ocasión la han confundido con una prost*t*ta.
Y no es que ella vaya vestida de forma provocativa. Ni mucho menos. Pero es un lugar donde sólo hay hombres. “Ellos lo tienen más fácil. Yo he visto camioneros meando de noche desde arriba de la puerta de la cabina, o en la rueda del camión”. Y, por supuesto, van al restaurante sin ningún problema.
emprenem.ara.cat
Un día cualquiera de una camionera y precisamente una de las noches la pasa en el parking de La Maña!
He puesto en negrita algunos detalles, entre ellos el de que a las 6 de la mañana los otros camiones ya se habían ido!
Por abrir otra hipótesis, podría algún camionero haber visto a Esther e intentado sobrepasarse con ella?
Si os fijáis la camionera dice que ella de noche no va al baño de ningún restaurante ni de ningún área de servicio, porque no es la primera vez que se lleva un susto por haberla confundido con una prost*t*ta.
INTERNACIONAL 29/11/2021
Vida de una camionera
El ARA acompaña durante cuatro días a una catalana que conduce un tráiler y hace viajes al extranjero
Mònica Bernabé11 min
Montse Vila al volante del tráiler que conduce.
Es un restaurante de carretera, de esos donde se dice que se come bien porque siempre paran camioneros.
De hecho en el parking hay cinco tráileres aparcados, uno al lado de otro.
Está en el pequeño municipio de Traspinedo, en la provincia de Valladolid.
El nombre del restaurante se puede leer en la fachada: La Maña.
Está escrito con grandes letras blancas pero a estas horas apenas se ven porque hay poca luz en el exterior. Son las ocho de la tarde y ya hace rato que se ha hecho de noche.
“No sé si quedarme aquí. Este lugar no me gusta demasiado porque hay un coche abandonado”, reniega Montse Vila, mientras hace maniobras para aparcar el camión, un mastodonte de 12 ruedas y 17 metros de largo. Efectivamente, en un lateral del parking hay un vehículo destartalado. Aun así Montse para por fin el tráiler, corre la cortina de la cabina para que no la vean desde fuera y empieza el ritual de cada noche: se pone el pijama, coloca un pequeño hule sobre el salpicadero del vehículo para utilizarlo como mesa, saca un táper con comida de una nevera y la sirve sin calentar en un plato de cartón.
Antes de empezar a cenar, se fuma varios pitillos sin moverse de delante del volante mientras mira una película de Netflix en una pantalla que hay instalada estratégicamente encima del asiento del copiloto. No baja del vehículo para nada, ni va al restaurante a pesar de que está a escasos metros, ni tan siquiera al lavabo público. Orina en un cubo de basura que cierra con una tapadera para que no haga olor y donde coloca una doble bolsa para que no gotee. Por la noche también duerme dentro del camión, en una estrecha litera que hay justo detrás de los asientos.
Al lado del tráiler aparcan más tarde otros dos camiones de también grandes dimensiones. Uno de los camioneros, un hombre, sí que baja del vehículo y se dirige al restaurante. El otro, que tiene cara de latinoamericano, echa la cortina de la cabina y se queda dentro. “Los panchitos normalmente no bajan porque no quieren gastar dinero”, suelta Montse mirándolo de reojo. Habla así, sin filtros.
Montse Vila Andreu es de Deltebre, tiene 42 años y conduce un tráiler desde hace casi cinco. Es una de las poquísimas mujeres que se dedican a un oficio que en España está copado por hombres. Es autónoma y viaja donde haga falta. Normalmente está fuera de casa de lunes a viernes. Esta mañana salió de Tortosa con un cargamento de casi 5.600 kilos de gomas para neveras, y se dirige a Estarreja, en Portugal. Pero también hace viajes a Francia, Bélgica, Reino Unido y, por supuesto, a cualquier lugar de España. Sola, siempre sola.
Se hizo camionera porque su padre lo era aunque, admite, a él no le hubiera gustado que ella se dedicara a este oficio. “Decía que no era un trabajo para una mujer”. Y algo de razón tenía. Al menos no es lo mismo para una mujer que para un hombre.
Café, frío y oscuridad
A las seis de la mañana suena el despertador y Montse se incorpora y enciende una cafetera eléctrica que lleva en el camión. Rápidamente una olor intensa de café inunda la cabina. A través de las ventanillas no se ve nada, sólo una oscuridad inmensa. El restaurante está cerrado y no hay ninguna farola encendida. Los dos camiones que estaban aparcados al lado ya se han ido. El termómetro marca un grado, afuera hace un frío que pela.Por la mañana Montse tampoco va a ningún lavabo público. Se lava la cara y los dientes con el agua helada de un depósito que hay en los bajos del camión y que tiene un pequeño grifo. “En verano, si puedo, me ducho cada día”, aclara. Pero en invierno hay que tener muchas ganas de lavarse para ducharse en una área de servicio en España. Según dice, es muy difícil que las duchas tengan calefacción, a menudo están sucias y en algunos casos están dentro del lavabo de los hombres. Así que ella prefiere limpiarse el cuerpo con “toallitas de viejecito”, como ella las llama. “Son mejores que las de bebé. Lo sé porque las he probado todas”.
Montse lavándose los dientes con el agua de un depósito que hay en los bajos del camión.
Montse no va a los lavabos púbicos ni a los restaurantes de las áreas de servicio, sobre todo de noche, porque dice que ya ha tenido varios sustos y en más de una ocasión la han confundido con una prost*t*ta.
Y no es que ella vaya vestida de forma provocativa. Ni mucho menos. Pero es un lugar donde sólo hay hombres. “Ellos lo tienen más fácil. Yo he visto camioneros meando de noche desde arriba de la puerta de la cabina, o en la rueda del camión”. Y, por supuesto, van al restaurante sin ningún problema.
Vida d'una camionera
L'ARA acompanya durant quatre dies una catalana que condueix un tràiler i fa viatges a l'estranger
emprenem.ara.catBastante recomendable guantes , bufanda y gorrito. No está el precio del gas para que gasten en calefacciónHaz lista de invitados así ya cunetas a ciencia cierta, manda la ubicación.
los guantes ya los llevamos puestos
Curioso!! Muy curioso!!
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Que la dejo alli dice el. Yo eso lo veo FATAL.
todo lo que hizo despues, quiero ser cauta y no llamarle de todo hasta que no tenga claro que hizo y que no.
Tu, como tienes claro lo que hizo, le juzgas asi.
Si yo lo tuviera igual de claro, firmaria tus palabras.
Pero a mi me falta saber si desde el jueves hizo o no hizo lo que se comenta en el foro.
Me faltan mas fuentes que una para afirmarlo, porque solo te tengo a ti y hay hechos que no me cuadran, como te expuse.
Si la familia se preocupa el jueves mismo, pero no tanto como para denunciar porque ya habia pasado antes - y esto es un HECHO que yo tengo contrastadisimo y tu no crees que fuera como yo digo-, pues dudo mucho que se movilizaran en el mismo jueves los amigos para llamar a O.
Y de esa info tuya que no me cuadra, es desde la cual pongo en cuarentena que puede que algunad otras afirmacioned que te constan sobre la actitud de Oscar, no sean exactas.
Creo que ahora si nos empezamos a entender, no??
Os dejo primos, a ver so hay noticias pronto.
Buenas noches!!
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