Especulando, que es gratis, este chico podría tener algún tipo de trastorno mental y, por su operación de espalda por la lesión de surf, entró en total paranoia de que ya no era "perfecto " y optó por desaparecer y convertirse en un personaje de ficción.Acuérdate que no se sabe quien está pagando a los abogados. El benefactor se ha mantenido en el anonimato (se ha especulado que podría ser un billonario de alto perfil usando el esquema de lo que ha sucedido con los costos de Trump y sus 34 condenas de felonías). Además, hay varios grupos recaudando dinero online para su defensa que los abogados se niegan a tocar. Hasta ahora lo poco que se sabe es que la hiperforrada familia se ha mantenido al margen de todo. Es más, la madre dijo haber perdido contacto con su hijo en junio.
A mí me parece que Luigi acaba cumpliendo condena en una especie de country club o lo que aquí llamamos "Club Fed". Lamentablemente, en este país la justicia es de compra y venta.
Incluso dispuesto a morir.
Un salir de esa vida de excelencia, de una familia millonaria de origen humilde que consigue y hasta sobrepasa el "sueño americano" con hermanos igualmente de excelencia académica y futuro brillante y que si tenía problemas médicos, no había problemas financieros en su familia para tener toda la atención médica que fuese nececesaria.
Resumiendo y en lenguaje de estar por casa, que enloqueció por completo y le dio por ser un pistolero.
Ha matado a ese hombre y planeaba la muerte de más ceos relacionados con los seguros médicos como le podría haber dado por cualquier otra cosa extraña
Y su propia hermana es médico, nada relacionado con su lesión es la causa, es un trastorno mental de algún tipo que le estalló en su cabeza y le derivó a ser un asesino.
A querer ser un asesino.
El hijo de un famoso ciclista y que tambien tenia un prometedor futuro en el deporte, un día lo dejó todo, se fue de ese mundo deportivo y familiar y le dio por recorrer mundo descalzo.
Y por ahí anda
Y tan feliz.
No todo el mundo está capacitado para la excelencia y el aguantar la presión de ese ritmo y destino de excelencia el resto de su vida.
Pero 20 años de cárcel no se los quita nadie.