PRINCESA LEONOR.
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La guardiamarina Borbón solo será tratada de Su Alteza Real cuando pise tierra, pero una tradición marinera centenaria podría darle la oportunidad de jugar a asumir el mando.
El buque-escuela Juan Sebastián de Elcano ya ha soltado amarras con la princesa Leonor de Borbón como parte de la promoción del 97º crucero de instrucción. Tras su primera
parada en las islas Canarias, donde recalarán primero en Santa Cruz de Tenerife del 17 al 20 de enero, atracarán en Las Palmas de Gran Canaria del 21 al 23 de enero y comenzará su gran travesía por el océano Atlántico rumbo a Brasil, donde está previsto que permanezcan del 14 al 19 de febrero. A partir de ahí le espera un periplo por Iberoamérica hasta Nueva York, para volver a España (ella en avión tras pasar por una fragata, sus compañeros en ‘Elcano’).
Según la ruta planeada, el bergantín-goleta de la Armada probablemente cruzará el Ecuador a principios de febrero, una hazaña muy especial para la tripulación que se señala con un repique de campana. Es de sobra conocido que los navegantes cuentan con numerosas supersticiones para atraer la buena fortuna, y esta es una de ellas. De acuerdo con una tradición que se remonta al siglo XVIII, el marino debe pedir permiso al ‘rey Neptuno’ antes de atravesar el círculo máximo de la tierra. Si se mantiene lo que vivió su padre Felipe el 5 de febrero de 1987 cuando llegó a ese punto del mapa con Elcano, un pequeño grupo de personas de la dotación ejercerá como ‘embajada del rey Neptuno y su corte’ y bajarán por el palo trinquete para ‘bautizar’ a quienes hayan pasado por esta línea por primera vez en su vida. “Don Felipe recibió un bautismo colectivo junto a toda su brigada mediante el roción de un manguerazo de agua salada en la propia cubierta del alcázar, la parte central de la cubierta alta, entre el regocijo de todos”, relató José Antonio Alcina, tutor de Felipe, en su libro La formación de un rey (La esfera de los libros).
La celebración continúa por la tarde con fiestas, bromas y charadas, entre ellas, un particular juego de intercambio de roles. Los miembros de los niveles más bajos de la dotación ‘toman el mando’ del barco por unos momentos durante esta divertida pausa de la férrea jerarquía militar. “A las 10 horas llegó el dios Neptuno, acompañado de su verdugo y de dos ninfas, dirigiéndose ‘en procesión al puente de gobierno donde el comandante le ‘cedió’ el mando del Juan Sebastián de Elcano”, relataba el cuaderno de bitácora del crucero de 2018. Así pues, los tenientes y alférez realizan tareas ajenas a su posición como por ejemplo limpiar las cubiertas y los cabos y marineros cogen el timón –figuradamente–. Después de varios juegos y competiciones, se hace una entrega de premios, tras la cual, según contaba el relato de hace siete años “el rey Neptuno devolvió el mando al comandante del Elcano (...) y de repente el barco volvió a la normalidad”.
Así, la guardiamarina Leonor de Borbón, al igual que sus 75 compañeros, tendrá la oportunidad de asumir el poder por un día. Heredera al trono en un momento complejo para la monarquía, sobre ella pende una corona que cada vez parece pesar más. Los reyes ejercían un doble papel esta mañana en el muelle de Cádiz, y la emoción era palpable. Han despedido a su hija mayor ante el exigente viaje por mar que la mantendrá alejada de casa durante seis meses. Una obligación como futura reina de España y jefa de las Fuerzas Armadas que hasta ahora está cumpliendo con aplomo.
Doña Letizia no ha podido evitar ocultar las lágrimas: “Son muchos meses, hay muchas madres llorando”, expresó, señalando a los cerca de 1.500 de familiares y allegados de la dotación que partía hoy. Una madre, apoyada en la barrera, lanzaba besos a su hijo, encaramado al puente del buque. “¡Si no te está mirando ahora!”, le avisa su acompañante, a lo que ella contesta, embargada por la tristeza: “¡Da igual, ya mirará!”. Felipe, por su parte, ha sacado el móvil para inmortalizar la imagen de su primogénita saludando desde el navío.
La experiencia vivida esta semana ha estado llena de símbolos y tradición. El día anterior, tras ser recibidos en el Ayuntamiento de Cádiz, los guardiamarinas se dirigieron a San Fernando para visitar el Panteón de los Marinos Ilustres, donde en el salón del cenotafio vertieron aguas de todos los mares que ha surcado el buque en su última formación. La mañana del sábado comenzaba con la misa en el convento de Santo Domingo y la posterior procesión de la virgen de La Galeona, imagen que llevaban los galeones españoles que llegaron a América y Filipinas. Una vez en el puerto, al entrar al buque, lo primero que hicieron Leonor y todos los militares fue saludar a la bandera situada en la popa. Poco después, parte de la dotación trepaba a los palos para cubrir las jarcias: iba a llegar el rey. Una vez allí, siete salvas y veintidós cañonazos. Al soltar amarras, a las 12:00, la Salve Marinera interpretada por la Coral de la UCA. La lista de tradiciones es larga.
Costumbres como esta ayudan a romper la monotonía de la vida en la mar y relajan por unos momentos la dura disciplina que rige a bordo. Pero sin perder de vista el objetivo. Para el rey Juan Carlos, “era muy importante que don Felipe aprendiera a saber obedecer para saber luego mandar”, según revelaba Alcina. Este sábado, 38 años después, Felipe, hablando a los guardiamarinas, compartía unas palabras que seguramente haya escuchado Leonor más de una vez: “Recordad siempre que lleváis el prestigio y la imagen de España sobre vuestros hombros”.
www.revistavanityfair.es
El buque-escuela Juan Sebastián de Elcano ya ha soltado amarras con la princesa Leonor de Borbón como parte de la promoción del 97º crucero de instrucción. Tras su primera
parada en las islas Canarias, donde recalarán primero en Santa Cruz de Tenerife del 17 al 20 de enero, atracarán en Las Palmas de Gran Canaria del 21 al 23 de enero y comenzará su gran travesía por el océano Atlántico rumbo a Brasil, donde está previsto que permanezcan del 14 al 19 de febrero. A partir de ahí le espera un periplo por Iberoamérica hasta Nueva York, para volver a España (ella en avión tras pasar por una fragata, sus compañeros en ‘Elcano’).
Según la ruta planeada, el bergantín-goleta de la Armada probablemente cruzará el Ecuador a principios de febrero, una hazaña muy especial para la tripulación que se señala con un repique de campana. Es de sobra conocido que los navegantes cuentan con numerosas supersticiones para atraer la buena fortuna, y esta es una de ellas. De acuerdo con una tradición que se remonta al siglo XVIII, el marino debe pedir permiso al ‘rey Neptuno’ antes de atravesar el círculo máximo de la tierra. Si se mantiene lo que vivió su padre Felipe el 5 de febrero de 1987 cuando llegó a ese punto del mapa con Elcano, un pequeño grupo de personas de la dotación ejercerá como ‘embajada del rey Neptuno y su corte’ y bajarán por el palo trinquete para ‘bautizar’ a quienes hayan pasado por esta línea por primera vez en su vida. “Don Felipe recibió un bautismo colectivo junto a toda su brigada mediante el roción de un manguerazo de agua salada en la propia cubierta del alcázar, la parte central de la cubierta alta, entre el regocijo de todos”, relató José Antonio Alcina, tutor de Felipe, en su libro La formación de un rey (La esfera de los libros).
La celebración continúa por la tarde con fiestas, bromas y charadas, entre ellas, un particular juego de intercambio de roles. Los miembros de los niveles más bajos de la dotación ‘toman el mando’ del barco por unos momentos durante esta divertida pausa de la férrea jerarquía militar. “A las 10 horas llegó el dios Neptuno, acompañado de su verdugo y de dos ninfas, dirigiéndose ‘en procesión al puente de gobierno donde el comandante le ‘cedió’ el mando del Juan Sebastián de Elcano”, relataba el cuaderno de bitácora del crucero de 2018. Así pues, los tenientes y alférez realizan tareas ajenas a su posición como por ejemplo limpiar las cubiertas y los cabos y marineros cogen el timón –figuradamente–. Después de varios juegos y competiciones, se hace una entrega de premios, tras la cual, según contaba el relato de hace siete años “el rey Neptuno devolvió el mando al comandante del Elcano (...) y de repente el barco volvió a la normalidad”.
Así, la guardiamarina Leonor de Borbón, al igual que sus 75 compañeros, tendrá la oportunidad de asumir el poder por un día. Heredera al trono en un momento complejo para la monarquía, sobre ella pende una corona que cada vez parece pesar más. Los reyes ejercían un doble papel esta mañana en el muelle de Cádiz, y la emoción era palpable. Han despedido a su hija mayor ante el exigente viaje por mar que la mantendrá alejada de casa durante seis meses. Una obligación como futura reina de España y jefa de las Fuerzas Armadas que hasta ahora está cumpliendo con aplomo.
Doña Letizia no ha podido evitar ocultar las lágrimas: “Son muchos meses, hay muchas madres llorando”, expresó, señalando a los cerca de 1.500 de familiares y allegados de la dotación que partía hoy. Una madre, apoyada en la barrera, lanzaba besos a su hijo, encaramado al puente del buque. “¡Si no te está mirando ahora!”, le avisa su acompañante, a lo que ella contesta, embargada por la tristeza: “¡Da igual, ya mirará!”. Felipe, por su parte, ha sacado el móvil para inmortalizar la imagen de su primogénita saludando desde el navío.
La experiencia vivida esta semana ha estado llena de símbolos y tradición. El día anterior, tras ser recibidos en el Ayuntamiento de Cádiz, los guardiamarinas se dirigieron a San Fernando para visitar el Panteón de los Marinos Ilustres, donde en el salón del cenotafio vertieron aguas de todos los mares que ha surcado el buque en su última formación. La mañana del sábado comenzaba con la misa en el convento de Santo Domingo y la posterior procesión de la virgen de La Galeona, imagen que llevaban los galeones españoles que llegaron a América y Filipinas. Una vez en el puerto, al entrar al buque, lo primero que hicieron Leonor y todos los militares fue saludar a la bandera situada en la popa. Poco después, parte de la dotación trepaba a los palos para cubrir las jarcias: iba a llegar el rey. Una vez allí, siete salvas y veintidós cañonazos. Al soltar amarras, a las 12:00, la Salve Marinera interpretada por la Coral de la UCA. La lista de tradiciones es larga.
Costumbres como esta ayudan a romper la monotonía de la vida en la mar y relajan por unos momentos la dura disciplina que rige a bordo. Pero sin perder de vista el objetivo. Para el rey Juan Carlos, “era muy importante que don Felipe aprendiera a saber obedecer para saber luego mandar”, según revelaba Alcina. Este sábado, 38 años después, Felipe, hablando a los guardiamarinas, compartía unas palabras que seguramente haya escuchado Leonor más de una vez: “Recordad siempre que lleváis el prestigio y la imagen de España sobre vuestros hombros”.
Leonor de Borbón podrá ‘reinar’ por un día (en mitad del océano)
La guardiamarina Borbón solo será tratada de Su Alteza Real cuando pise tierra, pero una tradición marinera centenaria podría darle la oportunidad de jugar a asumir el mando.
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Es elegante aparte de bellisima la princesa de Asturias.Tiene una fotogenia maravillosa .A diferencia de su madre su lenguaje corporal es sosegado y tranquilo(gestos,posturas,movimientos de cuerpo y rostro)
Espero que el viaje sea para ella y sus compañeros una gran experiencia personal (aparte de didáctica).
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La princesa Leonor vive en el Juan Sebastián de Elcano sin escoltas, con 8 chicas y 67 chicos
La heredera al trono embarcó este miércoles en el mítico buque escuela de La Armada que zarpará el sábado del puerto de Cádiz
www.hola.comINTERCAMBIO DE LA ARMADA ESPAÑOLA CON LA ROYAL NAVY
La princesa Leonor de Borbón emprendió este sábado 11 de enero una nueva etapa en su formación militar a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano junto a otros 75 guardiamarinas. Para esta travesía, que la llevará durante los próximos seis meses por distintas partes del mundo, se ha compuesto una tripulación de un total de 200 personas, entre las que se encuentran profesores, médicos y profesionales encargados de la seguridad del grupo. Sin embargo, de entre todos ellos ha destacado un joven compañero británico: Joseph Bertelsen.
Quién es Joseph Bertelsen, el atractivo marino británico que acompaña a la Princesa Leonor a bordo del buque Juan Sebastián Elcano
Lo cierto es que poco se sabe del resto de compañeros de la Princesa Leonor, más allá de que todos forman parte del tercer curso de la Escuela Naval de Marín, que la Princesa de Asturias comenzó el pasado mes de septiembre.
Sin embargo, si se ha podido saber un poco más sobre este alférez de navío, de 26 años. Bertelsen ha sido seleccionado para ser uno de los tripulantes del buque como parte del programa de intercambio que las Armadas de Reino Unido y España comenzaron en 1996.
La princesa Leonor de Borbón emprendió este sábado 11 de enero una nueva etapa en su formación militar a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano junto a otros 75 guardiamarinas. Para esta travesía, que la llevará durante los próximos seis meses por distintas partes del mundo, se ha compuesto una tripulación de un total de 200 personas, entre las que se encuentran profesores, médicos y profesionales encargados de la seguridad del grupo. Sin embargo, de entre todos ellos ha destacado un joven compañero británico: Joseph Bertelsen.
Quién es Joseph Bertelsen, el atractivo marino británico que acompaña a la Princesa Leonor a bordo del buque Juan Sebastián Elcano
Lo cierto es que poco se sabe del resto de compañeros de la Princesa Leonor, más allá de que todos forman parte del tercer curso de la Escuela Naval de Marín, que la Princesa de Asturias comenzó el pasado mes de septiembre.
Sin embargo, si se ha podido saber un poco más sobre este alférez de navío, de 26 años. Bertelsen ha sido seleccionado para ser uno de los tripulantes del buque como parte del programa de intercambio que las Armadas de Reino Unido y España comenzaron en 1996.
Esta decisión ha estado determinada por su dominio del español, que aprendió durante su experiencia como mochilero por América del Sur. Y este no es el único rasgo que lo ha hecho destacar. Joseph Bertelsen es licenciado en biología marina por la West Sussex. En 2023, después de graduarse en Britannia Royal Naval College de Dartmouth, se unió al Royal Navy. "Es un auténtico privilegio y un honor ser seleccionado para participar en este intercambio con la Armada española a bordo del Elcano, es la oportunidad de una vida… Tengo muchas ganas de conocer a mis nuevos compañeros", declaró antes de embarcar.
El papel de Joseph Bertelsen
La Embajada británica ha dado a conocer que la función del alférez en el barco será la de enseñar inglés a los guardiamarinas y hacer de embajador de la Armada británica. Sin embargo, no es el único que se encuentra disfrutando de este programa. "En la actualidad, tres oficiales británicos se encuentran en España: además de Bertelsen, hay uno en la fragata Canarias y otro en el curso del Estado Mayor en Madrid. Es un auténtico privilegio y un honor ser seleccionado para participar en este intercambio con la Armada española a bordo de Elcano", añaden en su comunicado la Embajada.14.01.2025
www.eldebate.com
En el siguiente mapa podrá ver en tiempo real el trayecto que recorrerá el buque escuela de la Armada, en el que la heredera al Trono realizará a bordo parte de su plan de estudios del tercer curso de carrera, siendo instruida en asignaturas de Navegación, Astronomía, Meteorología, Operaciones Anfibias, Apoyos y Servicios de Combate y Maniobra, entre otras.
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Sigue al buque Elcano y a la Princesa Leonor en tiempo real
El muelle de Cádiz ha sido testigo este sábado 11 de enero de la salida del buque escuela Juan Sebastián de Elcano, que ha zarpado con la Princesa ...
En el siguiente mapa podrá ver en tiempo real el trayecto que recorrerá el buque escuela de la Armada, en el que la heredera al Trono realizará a bordo parte de su plan de estudios del tercer curso de carrera, siendo instruida en asignaturas de Navegación, Astronomía, Meteorología, Operaciones Anfibias, Apoyos y Servicios de Combate y Maniobra, entre otras.
J.S. DE ELCANO, Training Ship - Details and current position - IMO 8642567 - VesselFinder
Vessel J.S. DE ELCANO (IMO 8642567, MMSI 224977000) is a Training Ship built in 1928 and currently sailing under the flag of Spain.
Última edición:
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Jamón, paella y menús supervisados por un nutricionista: lo que comerá Leonor durante su travesía en Elcano
La princesa de Asturias tendrá una nutrición como el resto de sus compañeros. Estos son algunos de los alimentos de los tripulantes del barco
J.S. DE ELCANO, Training Ship - Details and current position - IMO 8642567 - VesselFinder
Vessel J.S. DE ELCANO (IMO 8642567, MMSI 224977000) is a Training Ship built in 1928 and currently sailing under the flag of Spain.
| Distance / Time | |
| Course / Speed | 253° / 7.6 kn |
| Current draught | 7.0 m |
| Navigation Status | - |
| Position received | 18 hours ago |
| IMO / MMSI | 8642567 / 224977000 |
| Callsign | EBCB |
| Flag | Spain |
| Length / Beam | - |
Last Port
14.01.2025