Caída del Régimen dictatorial del Assad en Siria tras 13 años de guerra civil

Eso no lo sabemos, en Libia, en Irak, en Túnez ... tb se temió lo mismo y no están peor ahora de lo que estaban. En Egipto tras derrocar a su dictador eligieron democráticamente a un partido integrista y hubo un golpe de estado militar, el golpista acaba de ser recibido en Noruega.
que en Libia NO Estn peor????????

ay madre

libia antes era un pais donde se vivia buiend con un pib per capita muy alto para su zona y si Gadafi era lo suyo pero ya

ahora es el mayor etercolero del mundo

esta petado de mercenariso de tdoos los colores y paises ayudando a lso jefes de la geura de turno

esta llebo de islamistas locos

de traficantes de armas

es un lugar donde literalmente no te metas. Yo te peudo decir que hay genet muy chunga que va alli ysa le espantado, Calro que etsan peor ,e stan muchisimo peor,

Hay desde trafico de escalvaso, islamistas locos, mafias de inmigrantes, trafico de armas, jefe de guerra, mercenarios.... y es desde Libia desde donde tdoos los islamistas consiguen als ramas

por eso hay miul muertos en Mali y Burkina faso cada año, por eso los islamistas matan a cristiiano en el chad porque desde Libia les entra todo tipo de armas ((bueno en el caso de Mali por los rusos hay ayuda directa francesa pero en lso otros dos paises todo vine de Libia)

libia es un poco donde nadie mira


de verdad yo rcreo que la gente ahbla por hablar leyendo los diarios pero deicr que libia no etsa peor que lo que estaba es no tener ni pajolera idea

ah e Irak esta genuial tambien entre la parte kurda, la parte yihadista y la parte controlada por Iran . el pais ya no existe como tal
 
Justo.

Assad era un tirano monstruoso, como Sadam, pero lo que va a venir será igualmente una tiranía monstruosa y, encima, islamista
No e spoe defender a Saddam pero este era un militar y aun viéndose rodeado salió a hablar a la población

Assad ha alucinado a los rusos pidiendo un avión para escapar y no dignabdose a hablar a los sirios.wsta en Moscú con asilo político perp los rusos le están poniendo a caldo por cobarde... No la cara dio.... El oftalmológo no dio para más....
 
El verdadero objetivo de esta debacle es destruir el proyecto de la Ruta de la Seda, en el cual el principal competidor económico de los EE.UU, China, ha invertido una cantidad enorme de recursos. Los países que se habían empezado a alinear con este proyecto, todos los cuales son economías cada vez más importantes (la India, Paquistán, Irán y Rusia, así como toda el Asia Central) han recibido un fuerte golpe y advertencia: América no está dispuesta a aceptar que la riqueza del planeta se distribuya entre diversos poderes. Por demás, Erdogan quería estabilizar la economía turca apropiándose de los campos petrolíferos de Siria, para así tener mayor poder sobre la región y poder medirse sin cuidado alguno con las nefastas monarquías de la península arábiga. Esto será, no obstante, un desastre absoluto.

Hay que recordar que esto se planeó desde los años 90, y el General Wesley Clark ya lo había denunciado en 2003:

1733745898780.png
 

Por una vez, el uso de la palabra “histórico” está justificado para describir el derrocamiento del régimen de Bashar Al Asad después de más de 50 años de brutal dictadura, 13 años de guerra civil intermitente y un mundo de sufrimiento.
El pueblo de Siria, o al menos la mayoría de él, está jubiloso. Debería disfrutar el momento. Se lo merece. Recuerda las celebraciones que acompañaron la caída de Saddam Hussein en Irak y de Muammar Gaddafi en Libia. Sin embargo, esos recuerdos conllevan una advertencia y una amenaza.
La advertencia es que la alegría puede convertirse rápidamente en lágrimas, y la liberación en una represión renovada, si el súbito colapso de estructuras autoritarias odiadas pero relativamente estables desencadena un descenso incontenible al caos. La amenaza es que el vacío político y militar resultante será disputado por actores interesados no en la justicia y la reconciliación, sino en el poder y la venganza. En Siria, la venganza es un plato que se sirve caliente y vuelve a estar en el menú.
El inicio de la campaña para derrocar a Al Asad se remonta a Daraa, en el sudoeste de Siria, escenario de una revuelta popular en 2011. En ese contexto, el avance exitoso del grupo militante Hayat Tahrir al-Sham (HTS) desde su base en Idlib, en el noroeste de Siria, hasta la capital, Damasco, es un final apropiado: una revolución popular del pueblo para el pueblo. Sin embargo, nadie puede decir todavía qué tipo de futuro prevé para Siria el líder de HTS, Abu Mohammed al-Jolani, ex yihadista vinculado a Al Qaeda y un terrorista en búsqueda reconvertido en 'libertador nacional'. HTS tiene antecedentes de abusos de los derechos humanos y de gobierno autoritario en Idlib.
Según se informa, muchos sirios siguieron en masa la bandera de HTS cuando las fuerzas de Jolani avanzaron hacia el sur. Pero otros grupos, con objetivos e intereses diferentes, se están moviendo rápidamente para explotar la crisis. Entre ellos se incluyen una coalición de milicias nacionalistas lideradas por los kurdos en el noreste –las Fuerzas Democráticas Sirias, apoyadas por Estados Unidos–; facciones rebeldes apoyadas por Turquía conocidas colectivamente como el Ejército Nacional Sirio, y grupos de oposición en el sur, unidos por el odio a Al Asad, pero tal vez no mucho más.
¿Se puede reconstruir el mosaico sirio de antes de la guerra –multiétnico, multirreligioso, inusualmente tolerante y secular–? ¿Es Jolani un hombre apto para liderar una nación? ¿Quién más podría evitar una fractura territorial y política anárquica? Nadie tiene respuestas a estas preguntas todavía. El primer ministro del régimen, Mohammed Ghazi Jalali, anunció que, a diferencia del derrocado Al Asad, se queda y está dispuesto a trabajar con los insurgentes. Palabras valientes, y esperemos que no sean las últimas.
Los desafíos que tenemos por delante son verdaderamente abrumadores. La guerra civil mató a más de 300.000 personas, aunque algunas estimaciones duplican esa cifra. Se cree que unas 100.000 personas están desaparecidas desde 2011. ¿Dónde están? Ahora comienza un terrible recuento. La mitad de la población –unos 12 millones de personas– está desplazada. Decenas de miles fueron detenidas sin juicio, torturadas, maltratadas por el régimen. Sus cárceles se están vaciando, enviando una marea de personas enojadas, amargadas, con cicatrices físicas y psicológicas y vengativas de regreso a una sociedad devastada y ya disfuncional. Millones de refugiados, en Turquía y Jordania, pueden regresar a casa en masa. Se avecinan calamidades humanitarias y de seguridad.
La intromisión extranjera destructiva –central en la historia de Siria desde que comenzó la guerra– es otra amenaza muy real si las cosas se desmoronan. El derrocamiento de Al Asad representa una enorme derrota para sus principales patrocinadores, Rusia e Irán. Vladimir Putin invadió Siria en 2015 después de que el entonces presidente estadounidense, Barack Obama, diera marcha atrás priorizando la lucha contra el terrorismo por encima del apoyo a las fuerzas prodemocráticas. Los bombarderos de la fuerza aérea rusa, junto con la Guardia Revolucionaria iraní, mantuvieron a Al Asad en el poder. La recompensa a Putin fueron bases militares y mayor influencia. Todo eso está en peligro ahora.
Para Irán, el colapso sirio es sólo el último de una serie de reveses vinculados a la respuesta de Israel tras los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023. El debilitamiento de Hezbolá tras la ofensiva israelí en el Líbano, aliado clave de Teherán en el llamado “eje de resistencia” regional, quitó a Al Asad otro apoyo importante y volvió más vulnerable la posición de Irán. Se dice que su embajada en Damasco está siendo atacada. Sus diplomáticos han huido. Sin embargo, ni Rusia ni Irán se rendirán. Tratarán de moldear el nuevo orden en su beneficio, sin importar lo que sea mejor para el pueblo sirio.
Lo mismo puede decirse de Israel, que, en su campaña contra Hamás y otros aliados iraníes, ha bombardeado repetidamente lo que dice son objetivos iraníes y de Hezbolá en Damasco y otros lugares de Siria. Teherán ve la mano de Israel en la caída de Al Asad. Aunque tal vez no deliberadamente, Israel –siguiendo la ley de las consecuencias no deseadas–ciertamente ayudó a debilitarlo. Ahora le preocupa un estado fallido en su frontera, quién controla las armas químicas de Al Asad y una posible amenaza renovada de los yihadistas islamistas.
Hablando de goles en propia puerta, el exfutbolista Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, está claramente a la cabeza. Se cree que dio luz verde a HTS para lanzar su ofensiva después de que Al Asad rechazara sus intentos de crear una zona de amortiguación fronteriza dentro de Siria. Erdogan está obsesionado con la “amenaza” kurda del norte de Siria e Irak. Ahora puede enviar más tropas al otro lado de la frontera. Sin embargo, ¿realmente tenía la intención de aplastar al régimen y provocar el caos en toda Siria? Tal vez Erdogan podría explicar cómo sirve eso a los intereses de Turquía.
A menos que se crea en las teorías conspirativas más oscuras, Estados Unidos, Gran Bretaña y Europa han estado tan sorprendidos por los acontecimientos como Al Asad. Eso en sí mismo es un fallo alarmante de inteligencia, pero, de nuevo, el papel de Occidente en la guerra siria ha supuesto un fracaso largo y abyecto. En gran medida, observó cómo se desarrollaban los más terribles sufrimientos, desplazamientos masivos, crímenes de guerra, uso ilegal de armas químicas y otros horrores. Sus intervenciones ocasionales –como el bombardeo aislado de Donald Trump en 2017 de instalaciones militares del régimen después de un ataque con armas químicas en Khan Sheikhun en ldlib– se llevaron a cabo más para aliviar las conciencias colectivas que para lograr un cambio real. Ahora Occidente vuelve a ser un espectador, aunque el riesgo que plantea el desmoronamiento del Estado es relevante. “No es nuestra lucha”, dice Trump con aire de suficiencia.

Tampoco tiene sentido buscar ayuda en los vecinos árabes del Golfo en este momento crítico. Hace poco más de un año, Al Asad logró romper su bien merecido estatus de paria internacional en una cumbre de la Liga Árabe en Riad. Fue agasajado, entre otros, por el líder saudí, Mohammed bin Salman. El mensaje no tan diplomático fue el que que Al Asad había regresado. Rehabilitado. El mundo podía volver a hacer negocios con él.



Error. Al Asad era un monstruo y sigue siéndolo. Dondequiera que esté, no debería dormir tranquilo. Mientras tanto, es el pueblo sirio el que tiene que salvar a Siria. Nadie más lo hará.
 
Vamos, que el señor terrorista que va a gobernar Siria se va a moderar como los talibanes de Afganistán. Todo perfecto.
Y los que han ayudado a poner a ese terrorista son los que se llaman el mundo libre y democratico que van dando lecciones a todo quisqui.
 
Vamos, que el señor terrorista que va a gobernar Siria se va a moderar como los talibanes de Afganistán. Todo perfecto.
Y los que han ayudado a poner a ese terrorista son los que se llaman el mundo libre y democratico que van dando lecciones a todo quisqui.
Hay un canal que leo de un arqueólogo ruso. Todo es un caos. Estan todos saqueando. Esta alucinando. Toda la gente hasta ahora normal va a todo edificio que haya a saquear todo lo que se pueda. Hay tiroteos. Se están ajustando cuentas. Lo mejor en Damasco ahora es encerrarte en tu casa con provisiones su no salir.
 

Los kurdos por ciertos están luchando como gatos panza arriba para defender su zona . Turcos e islamistas... La que les viene es poca. Siempre ha sido usados por occidente pero a la hora de la verdad los dejan tirados. Esperemos que los cristianos se les una y vayan todos a una zona más o menos segura. O establezcan algunas provincias donde puedan vivir kurdos, cristianos y akutlitas, que son chiis pero de los que beben vino o sea muy lights y por regla general huyen de islamistas pocos

Y sabes donde can a huir los cristianos? Probablemente al libano todos los que pueda.... Anda que la cosa está bien allí.
 
Back