No me dan a elegir y no soy monárquica, pero tengo que decir que me da un poco de miedo la idea de una república. Aunque no apoyo la monarquía, creo que hay cosas que ofrece que el sistema presidencialista no siempre garantiza, como estabilidad y neutralidad.
En vez de cambiar de presidente cada pocos años, el rey es una figura constante que puede dar unidad al país, especialmente en momentos difíciles. En una república, el cambio de liderazgo cada pocos años puede generar más inestabilidad y división.
Además, el monarca, al no estar vinculado a un partido, tiene la ventaja de ser neutral. Puede representar a todos los ciudadanos sin estar presionado por intereses políticos, algo que no siempre pasa con un presidente, que suele estar alineado con un partido y puede ser percibido como parcial.
Me da inquietud la república porque, en muchos países, no es cierto que el presidente lo elija todo el mundo. Por ejemplo, en Italia, cuando Giorgio Napolitano era presidente, mucha gente se quejaba de que era comunista, lo que no representaba a todos. Lo eligen los representantes, pero el pueblo no tiene mucho que decir al respecto. En España, por ejemplo, el presidente sería elegido por el Parlamento, lo cual también me hace pensar si realmente tendrías el control sobre esa elección. Yo no quiero que el representante de Estado sea una figura abiertamente de izquierdas o de derechas.