A ver, que esto es lo de siempre. Y da igual que pasen los años, que cambien las generaciones que seguimos con el temita igual.
Las mujeres, AÚN por lo que veo y leo en los foros, siguen con esa necesidad de encontrar el amor romántico, esa persona especial, ese príncipe azul...y emparejarse (ya no te digo con 32 años, que eso ya es considerada una mujer ya que se le pasa el arroz) Y por este motivo, esa prisa social que nos han metido en la cabeza, vamos con la sexta puesta a toda hostia cada vez que conocemos a un tío.
Los hombres, por otro lado, con 32 años están en la flor de la vida, son jovencísimos. No tienen ninguna prisa por emparejarse, porque no buscan el amor romántico, ni creen que necesitan a una mujer u lado para completar sus vidas.
Por eso, tu estás enfocando esos comienzos de relación como algo suuuuuuuper importante, la potencial "historia de amor de tu vida", el hombre que te hará feliz, etc... mientras que el tiene en mente que ha conocido una chica que le gusta, que le apetece estar con ella. Y (y esto es lo más importante) por ahora ni se ha planteado que pasará en el futuro.
Así que tu estás leyendo entre líneas, analizando micromovimientos, risas. Intentando buscar intenciones en sus palabras, en sus gestos, en sus mensajes etc...
Mientras que el no se ha parado a pensar ni un segundo en nada de tus intenciones. Seguramente le gustes, quiera seguir conociéndote, posiblemente pueda salir una relación bonita con el. Pero puede ser que no, que sea un tío con el que al final no cuaje la relación (incluso puede ser, que lo sigas conociendo y no te guste lo que veas).
Hasta que las mujeres no nos desprogramemos con esa idea de romanticismo y de el hombre de nuestra vida, etc... vamos a estar siempre en desventaja al comenzar una relación. Esa inseguridad que muestras, es por culpa de esto. Date cuenta de que tu no necesitas eso, tu ya tienes tu vida hecha y eres feliz. Si ahora quieres estar con alguien, es porque esa persona te llena. Y para eso, tienes que conocerla más, probar más con el. Y poco a poco, quizá, salga algo bueno de ello.
Intenta pensar como pensaría el.