El juicio era básico y no tenía riesgo de salir mal (mi ex robó un dinero, tengo las pruebas, y lo tiene que devolver; punto pelota).
Yo no iba nerviosa por el juicio, sino por encontrarme con él.
Yo quería ir elegante, de peluquería, toda chula.... y en cambio iba con gripe, greñas y ojeras. Fatal.
La noche antes compré en el súper de enfrente maquillaje básico y una pinza de pelo mona.
Día del juicio: voy, y me quedo dormida





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Me desperté de pura chiripa media hora antes del juicio,
Llamé inmediatamente un Uber, y salí pintando, sin desayunar ni nada. Imaginaos cómo fue la cosa, que en el Uber me di cuenta de que tenía un rulo colgando en el pelo.
Y me acordé de
@Glacieropal diciendo: "para que quede claro que ni me importa, que ni me arreglo y voy con el rulo colgando".
Al llegar me topé de frente con él y su abogado. Quise mirarle en rollo penetrante tipo las películas, pero el tío se giró para no mirarme

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Luego vi que estaba al lado mi abogado, y me fui con él.
Mi abogado es bastante amigo, y tenemos un "humor absurdo" muy parecido.
Empezamos a hacer chistes, no se si mi abogado pretendía tranquilizarme o salió natural, porque la realidad es que siempre hablamos así. Pero el caso es que nos entró la risa floja.
Yo me lo pasé tan bien, que hasta me olvidé que estábamos en los Juzgados.
Al llamarnos al juicio, yo me giré y vi a mi ex y su abogado mirándonos fijamente, con una cara de pánfilos aburridos...!
Supongo que nos estaban escuchando por si pillaban algún dato, y que debieron flipar viendo la cantidad de tonterías que éramos capaces de decir antes de entrar en una sala a jugarnos una cantidad importante de dinero.
Total, que con esto también me acordé de
@Esfinge : que si hay algo mejor peor que entrar con la cara bien alta, es entrar tronchándote a carcajada limpia, que fue justo lo que pasó.
Así que fue muy bien todo

