REVISTA POINT DE VUE
“¿Hasta cuándo será una primicia? Estaba claro: a las princesas les gusta ir a la playa. Eso es todo”, zanja el artículo, que resta importancia al hecho que la princesa Leonor tenga bikinis en su armario y le guste ir a la playa junto a sus amigos.
Escultural en bikini y gafas de sol, “ La princesa Leonor se relaja en la playa”, titula la revista española Diez Minutos , que no olvidó anunciar la primicia en exclusiva en redes sociales.
Las fotos de la hija del Rey de España , quien se encuentra actualmente en ruta hacia Valparaíso, fueron tomadas el 5 de marzo, durante la escala de su barco escuela en Montevideo, Uruguay. Tardó un mes en publicarse. Según nuestros colegas de la revista digital Vanitatis , "había más obstáculos para vender estas fotos robadas que para obtenerlas".
Más allá del precio –ciertamente alto– que ha supuesto semejante reportaje sobre una futura reina en la playa, un auténtico caso de conciencia parece haber surgido en el seno de las redacciones españolas. Unos días después de los paparazzi, Zarzuela pasó a la ofensiva para proteger la privacidad de la Princesa Heredera , tras la publicación de otras fotos, fotos de vigilancia de un supermercado en Santiago, durante la escala en Chile.
Y, en los tiempos que corren, disfrutar de una exclusividad limitada a un bikini de princesa también plantea interrogantes. ¿Cuántas imágenes de príncipes en traje de baño han circulado sin conmover al público ni aparecer en los titulares de la prensa? Está claro que las sesiones de kitesurf del príncipe Kiril de Bulgaria o los días en el yate de Carlos Felipe de Suecia causarán cada vez menos sensación, a pesar de la evidente ventaja de su físico. ¿Cuánta expectación suscitan, por otra parte, estas fotos de vacaciones si en ellas aparece una Angèle, una Vanessa Paradis o, por supuesto, una Leonor de España?
En la década de 1980, Stéphanie de Monaco acabó con cualquier esperanza de poder "subirse a esta ola" al aparecer en bikini en su vídeo musical Ouragan . El desaire fue aún más grave ya que los modelos que lucieron fueron creaciones propias para la marca de ropa de playa Pool Position. El mensaje – ¿Hasta cuándo será una primicia? – estaba claro: a las princesas les gusta ir a la playa. Eso es todo.
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Sculpturale en bikini et lunettes de soleil, "la princesse Leonor se détend à la plage", titre le magazine espagnol Diez Minutos, qui n’a pas oublié d’annoncer le scoop exclusif sur les réseaux sociaux.
Les photos de la fille du roi d’Espagne, qui se trouve en ce moment en route vers Valparaiso, ont été prises le 5 mars, lors de l’escale de son navire-école à Montevideo, en Uruguay. Il aura fallu un mois pour les voir publiées. D’après nos confrères du magazine en ligne Vanitatis, "il y aura eu davantage d’obstacles pour vendre ces clichés volés que pour les obtenir"
Au-delà du prix – certainement élevé – d’un tel reportage d’une future reine à la plage, un véritable cas de conscience semble s’être imposé au sein des rédactions espagnoles. Peu de jours après la paparazzade, la Zarzuela est en effet passée à l’offensive pour protéger la vie privée de la princesse héritière, après la diffusion d'autres clichés, des photos de surveillance d’un supermarché de Santiago, lors de l’escale au Chili.
Et, à notre époque, jouir d’une exclusivité se résumant au bikini d’une princesse pose en outre question. Combien d’images de princes en maillot de bain ont circulé sans émouvoir le public ni faire les choux gras de la presse ? Force est de constater que les séances de kite-surf du prince Kyril de Bulgarie ou les journées en yacht de Carl Philip de Suède feront toujours moins sensation, malgré l’avantage évident que présente leur plastique. Combien d’attente, en revanche, suscitent ces clichés de vacances s’ils mettent en scène une Angèle, une Vanessa Paradis ou, bien entendu, une Leonor d’Espagne ?
Dans les années 1980, Stéphanie de Monaco désamorçait tout espoir de pouvoir "surfer sur cette vague" en apparaissant en bikini dans son clip vidéo Ouragan. Le pied de nez allait plus loin encore puisque les modèles qu’elles portaient étaient ses propres créations pour la marque de vêtements de plage Pool Position. Le message – Combien de temps relèvera-t-il du scoop ?! – était limpide : les princesses aiment se rendre à la plage. C'est tout.
“¿Hasta cuándo será una primicia? Estaba claro: a las princesas les gusta ir a la playa. Eso es todo”, zanja el artículo, que resta importancia al hecho que la princesa Leonor tenga bikinis en su armario y le guste ir a la playa junto a sus amigos.
La princesse Leonor d'Espagne en bikini… et alors ?
La paparazzade a eu lieu lors de l’escale du Juan Sebastian de Elcano à Montevideo, en Uruguay. Plus de trois semaines après, les photos sont en une du magazine espagnol Diez Minutos, suscitant une curiosité questionnable de nos jours.
www.pointdevue.fr
La Princesa Leonor de España en bikini... ¿y qué?
La paparazzi tuvo lugar durante la escala del avión de Juan Sebastián de Elcano en Montevideo, Uruguay. Más de tres semanas después, las fotos aparecieron en la portada de la revista española Diez Minutos, despertando una curiosidad que hoy en día es cuestionable.Escultural en bikini y gafas de sol, “ La princesa Leonor se relaja en la playa”, titula la revista española Diez Minutos , que no olvidó anunciar la primicia en exclusiva en redes sociales.
Las fotos de la hija del Rey de España , quien se encuentra actualmente en ruta hacia Valparaíso, fueron tomadas el 5 de marzo, durante la escala de su barco escuela en Montevideo, Uruguay. Tardó un mes en publicarse. Según nuestros colegas de la revista digital Vanitatis , "había más obstáculos para vender estas fotos robadas que para obtenerlas".
Más allá del precio –ciertamente alto– que ha supuesto semejante reportaje sobre una futura reina en la playa, un auténtico caso de conciencia parece haber surgido en el seno de las redacciones españolas. Unos días después de los paparazzi, Zarzuela pasó a la ofensiva para proteger la privacidad de la Princesa Heredera , tras la publicación de otras fotos, fotos de vigilancia de un supermercado en Santiago, durante la escala en Chile.
Y, en los tiempos que corren, disfrutar de una exclusividad limitada a un bikini de princesa también plantea interrogantes. ¿Cuántas imágenes de príncipes en traje de baño han circulado sin conmover al público ni aparecer en los titulares de la prensa? Está claro que las sesiones de kitesurf del príncipe Kiril de Bulgaria o los días en el yate de Carlos Felipe de Suecia causarán cada vez menos sensación, a pesar de la evidente ventaja de su físico. ¿Cuánta expectación suscitan, por otra parte, estas fotos de vacaciones si en ellas aparece una Angèle, una Vanessa Paradis o, por supuesto, una Leonor de España?
En la década de 1980, Stéphanie de Monaco acabó con cualquier esperanza de poder "subirse a esta ola" al aparecer en bikini en su vídeo musical Ouragan . El desaire fue aún más grave ya que los modelos que lucieron fueron creaciones propias para la marca de ropa de playa Pool Position. El mensaje – ¿Hasta cuándo será una primicia? – estaba claro: a las princesas les gusta ir a la playa. Eso es todo.
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La princesse Leonor d'Espagne en bikini… et alors ?
La paparazzade a eu lieu lors de l’escale du Juan Sebastian de Elcano à Montevideo, en Uruguay. Plus de trois semaines après, les photos sont en une du magazine espagnol Diez Minutos, suscitant une curiosité questionnable de nos jours.Sculpturale en bikini et lunettes de soleil, "la princesse Leonor se détend à la plage", titre le magazine espagnol Diez Minutos, qui n’a pas oublié d’annoncer le scoop exclusif sur les réseaux sociaux.
Les photos de la fille du roi d’Espagne, qui se trouve en ce moment en route vers Valparaiso, ont été prises le 5 mars, lors de l’escale de son navire-école à Montevideo, en Uruguay. Il aura fallu un mois pour les voir publiées. D’après nos confrères du magazine en ligne Vanitatis, "il y aura eu davantage d’obstacles pour vendre ces clichés volés que pour les obtenir"
Au-delà du prix – certainement élevé – d’un tel reportage d’une future reine à la plage, un véritable cas de conscience semble s’être imposé au sein des rédactions espagnoles. Peu de jours après la paparazzade, la Zarzuela est en effet passée à l’offensive pour protéger la vie privée de la princesse héritière, après la diffusion d'autres clichés, des photos de surveillance d’un supermarché de Santiago, lors de l’escale au Chili.
Et, à notre époque, jouir d’une exclusivité se résumant au bikini d’une princesse pose en outre question. Combien d’images de princes en maillot de bain ont circulé sans émouvoir le public ni faire les choux gras de la presse ? Force est de constater que les séances de kite-surf du prince Kyril de Bulgarie ou les journées en yacht de Carl Philip de Suède feront toujours moins sensation, malgré l’avantage évident que présente leur plastique. Combien d’attente, en revanche, suscitent ces clichés de vacances s’ils mettent en scène une Angèle, une Vanessa Paradis ou, bien entendu, une Leonor d’Espagne ?
Dans les années 1980, Stéphanie de Monaco désamorçait tout espoir de pouvoir "surfer sur cette vague" en apparaissant en bikini dans son clip vidéo Ouragan. Le pied de nez allait plus loin encore puisque les modèles qu’elles portaient étaient ses propres créations pour la marque de vêtements de plage Pool Position. Le message – Combien de temps relèvera-t-il du scoop ?! – était limpide : les princesses aiment se rendre à la plage. C'est tout.
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