Parecido le pasó a mi madre hace muchos años en un pueblo pequeño que vivía. Mi madre cosía ropa en el garaje y la vendía. Se dedicaba a ello, vamos. Hablo cuando estas cosas se podían hacer sin mas.
Ella cada mes iba a la peluquería del pueblo, la peluquería de, llamémosle, Pepita. Con los años el pueblo se fue ampliando y en la otra punta del pueblo abrió otra peluquería, a esta la llamaremos Sonsoles. Pues bien, Sonsoles le compraba bastante ropa a mi madre. Pasado el tiempo mi madre sintió q para ser justa con Sonsoles, iría una mes a su peluquería y al otro mes a la de Pepita y así sucesivamente. Ella sentía q así era justa con las dos. Con Pepita porq así no dejaría de ir ya q llevaba años yendo y con Sonsoles era una forma de devolverle el "favor". Aclaro q la pobre Sonsoles jamás le insinuó ni pidió nada a mi madre.
Total, q Pepita se enfadó con mi madre. Cada vez q iba hablaba muy seca y cambio el trato. Mi madre dejó de ir y estuvo años yendo donde Sonsoles, hasta q mi madre se mudó de comunidad.
¿enserio vale la pena perder a una clienta de tantos años por algo así? Q no es q hubiera dejado de ir, sino q se turnaba. no se, me flipan estas cosas cuando encima es un negocio propio.
Y a mi me paso algo parecido. Llevo años yendo a mi peluquera. Una vez tarde mas en ir porq me fui de viaje y allí me corte el pelo. Al volver a su pelu ella me lo noto y me soltó un comentario, q ahora no recuerdo bien, pero fue como diciendo q había ido a otro sitio. Le solté yo otro comentario dando a entender q si y q lo haría cuando hiciera falta y ahí quedo todo. Creo q ella supo donde estaba el limite y no volvió a pasarlo. Yo sigo yendo y todo bien con ella. Pero chicas ganas de meterse donde a uno no le llaman...