
Anecdotario (1)
Estaba en Londres. "¿Qué haces el fin de semana?". "Trabajar". "¿Vienes a verme?". Me quedé a pasar el fin de semana en Zarzuela. Era julio de 2010. Tumbados en la misma hamaca, bajo el porche de la piscina, enfrentados, me dijo "te amo" y le respondí "te amo". (La última vez que nos lo dijimos fue el 20 de mayo de 2004, en El Latigazo, un restaurante próximo a Zarzuela). Aquel instante, en la hamaca, fue uno de esos en que la vida da un vuelco. Esa misma noche continuó nuestra relación amorosa, interrumpida años antes, porque el amor siempre estuvo desde nuestro primer viaje a Venecia en 2002. Viajamos a Cabo Verde, a Grecia en crucero, a los Estados Unidos, a la campiña en Inglaterra, a Provenza en Francia, hasta finales de 2014. Venía a Londres, yo a Madrid. Durante año y medio pensamos y dimos pasos adelante con el objetivo de ser libres, tratamos de la cuestión del divorcio, las niñas, buscamos asesoramiento jurídico, miramos juntos una casa en la Florida que lindaba con Zarzuela donde vivir las etapas que estuviéramos en España, consideramos Nueva York como la mejor opción de residencia permanente, la idea de que tuviéremos un hijo nuestro por vientre subrogado en Los Angeles me la propuso estando en La Terre Blanche. Pusimos un nido en la calle Miguel Ángel. La discusión a que se refiere Peñafiel en agosto de 2011, fue la única que hemos tenido. Estábamos en Marivent. Ella besó a Felipe en las regatas y salió en las portadas. "¿Qué es esto?", le pregunté. "Lo he tenido que hacer para protegernos". Y yo la creí.
Estaba en Londres. "¿Qué haces el fin de semana?". "Trabajar". "¿Vienes a verme?". Me quedé a pasar el fin de semana en Zarzuela. Era julio de 2010. Tumbados en la misma hamaca, bajo el porche de la piscina, enfrentados, me dijo "te amo" y le respondí "te amo". (La última vez que nos lo dijimos fue el 20 de mayo de 2004, en El Latigazo, un restaurante próximo a Zarzuela). Aquel instante, en la hamaca, fue uno de esos en que la vida da un vuelco. Esa misma noche continuó nuestra relación amorosa, interrumpida años antes, porque el amor siempre estuvo desde nuestro primer viaje a Venecia en 2002. Viajamos a Cabo Verde, a Grecia en crucero, a los Estados Unidos, a la campiña en Inglaterra, a Provenza en Francia, hasta finales de 2014. Venía a Londres, yo a Madrid. Durante año y medio pensamos y dimos pasos adelante con el objetivo de ser libres, tratamos de la cuestión del divorcio, las niñas, buscamos asesoramiento jurídico, miramos juntos una casa en la Florida que lindaba con Zarzuela donde vivir las etapas que estuviéramos en España, consideramos Nueva York como la mejor opción de residencia permanente, la idea de que tuviéremos un hijo nuestro por vientre subrogado en Los Angeles me la propuso estando en La Terre Blanche. Pusimos un nido en la calle Miguel Ángel. La discusión a que se refiere Peñafiel en agosto de 2011, fue la única que hemos tenido. Estábamos en Marivent. Ella besó a Felipe en las regatas y salió en las portadas. "¿Qué es esto?", le pregunté. "Lo he tenido que hacer para protegernos". Y yo la creí.