Pues yo este último fin de semana tuve una experiencia que me ha dejado un poco descolocada
Visitamos a una parte de la familia de mi marido, que hacía 6 años que no veíamos.
El más mayor de los tíos, que fue el que nos ofreció su casa, su dinero y todo lo que hiciese falta cuando mi marido cortó de raíz con sus padres y tuvo su depresión bestial, me preguntó si habíamos pasado por casa de mis suegros o si ibamos a comer con ellos.
Juro que tuve la impresión de vivir un dêja vu
- Sabes que hace más de 10 años que no nos hablamos, no ha cambiado nada en ese aspecto.
Y entonces, el tío se revuelve un poco en el asiento y me suelta "la charla"
- A ver yo sé que por ejemplo yo soy raro, pero es que mi hermano (= mi suegro) telita. Aún así, yo, ahora que tengo 80 años , soy el más mayor, me considero algo así como el patriarca de la familia y me siento como en la obligación de cuidaros a todos, velar por una familia unida y que todos nos llevemos bien.Me gustaría que eso se arreglase
Yo cogí aire, miré a mi marido, que estaba frente a nosotros, ajeno , metido en otra conversación con otro tío y medí bien mis palabras para cortar aquello,porque la verdad, no me esperaba eso de él y le solté mi charla:
- Tú te consideras raro, yo soy rara y cada uno es raro y diferente y sin embargo aquí estamos hablando, felices y llevándonos todos bien.Créeme que no se deja de hablar a unos padres 10 años porque sean raros. Hay más cosas de fondo.
Valoro que quieras una familia feliz, te respetamos como mayor que eres, pero lo que tú deseas respecto a mis suegros, lo siento , no va a pasar.
Saqué mi móvil, donde tengo guardada una fotografía de mi marido en aquellos días fatídicos , para que jamás se nos olvidé lo bajo que cayó y se la enseñé . Es una fotografía donde mi marido , que era un chaval parecido al marido de la Pataki, en moreno, tiene más pinta de ser Bin Laden, con barba hasta el ombligo, pelos largos sin lavar y sin peinar y 30 kilos menos) .
Le dije: Por cosas como éstas, además de otras muchas, eso que tú deseas, por mi parte no sucederá.
Dudé mucho si contarle esta conversación o no a mi marido, pero al final del día se la conté.
Al contrario que yo, no le preocupó el cambio de bando de su tío a formar parte del club de los que opinan " tienes que llevarte bien con tus padres" , lo que le pareció de risa fue que se calificara y se sintiera como "patriarca" con la obligación moral de mantener la familia unida.
Frases que casualmente también decía su abuela. Ella antes le decía siempre a mi marido, cuando se le escapaba algún comentario negativo: "No tienes nada que recriminarle a tus padres" "llévate bien con tus padres" .
Después tuvo la desgracia de ver cómo pasaron de cuidarla y como todo era fachada y dejó de decirnos esas frases lapidarias.