El caso que se suele exponer de mujeres que se van con malotes, y luego acaban con "el carapadre", se debe a que la mujer "hibristofílica", a la que le van los malotes, llega un momento dado en el que tiene una experiencia muy muy mala con el malote de turno, y ya ha llegado a una edad en la que se tiene que digamos, conformar, por así decirlo, con un hombre que no tendrá la misma personalidad dominante porque ya no quiere problemas después de lo que le ha pasado. Más de una ha acabado en una comisaría poniendo denuncias o llevándose palos enormes por ver al malote como lo máximo. Conozco historias de terror.
Normalmente la mujer con gusto por los malotes tiene el perfil de choni (en muchos casos, no siempre), y le encanta que su novio sea un chulo, se siente segura, incluso vacilanpor ahí de lo que puede llegar a hacar su malote, como a alguna que he conocido, que ante una discusión con otra persona, iba diciendo "pues mi novio te coge y te parte la cara", amenazante, hasta que le pasa a ella.
Aunque pueda llegar un momento en el que se acojone con el tío al que ha elegido, por razones obvias.
Suelen ser mujeres a las que en este foro por ejemplo, se las ha denominado "rabocéntricas" de las que dependen mucho de la pareja, son inseguras y el novio lo es todo.
En el "carrusel" de la mujer que se va con malotes, se termina llegando casi siempre al punto de dar con un maltratador, por gustarle demasiado esa montaña rusa de irse con chulos. Luego se acojona y ya decide que mejor una vida tranquila con el carapadre antes que llevarse otro disgusto gordo, pero no indica que le hayan dejado de gustar esos hombres, sino que se ha tenido que rendir por llevarse un susto con el chulito.
A veces pasa que la mujer adicta a malotes ha tenido un historial de fracasos y sustos, y cuando llega a una edad, el "mercado" de malotes ha bajado, este tipo de hombres se ha ido diluyendo con la edad, y a estas mujeres ya les queda solo el consuelo de emparejarse con lo que vulgarmente "queda por ahí" y es donde entra el carapadre.
