Me gusta mucho tu enfoque. En mi caso, cuando tengo un bajón por algo emocional, suelo escribir lo que me pasa y las emociones que siento, también sin juicios y con comprensión hacia mí misma. Si hay algo que crea que haya hecho mal, o que haya podido herir a otros, lo escribo y escribo lo que me llevó a hacer eso y de qué forma podría solucionarlo. Llevo haciéndolo ya un tiempo, en una especie de diario, y conforme pasa el tiempo y voy releyendo lo que escribí meses atrás me resulta muy útil para irme conociendo mejor.
Otras cosas que me animan son llamar a alguna amiga, sobre todo esas amigas íntimas que son casi como hermanas. Siempre me siento mejor. Y cuando tenía a mi perra, estar con ella siempre me mejoraba el ánimo. Para mí, las mascotas son mágicas en ese aspecto.