Cuente, cuente.
¿Qué pasó?
Es una anécdota muy tonta (que me ha pasado más de una vez pero no tan exagerada) y todo por dos cosas:
1. Que hay quien cuando tiene visita tiene que hacer que coma o beba algo o parece que les va a caer una maldición
2. Que hay quien no entiende que cuando tienes una alergia alimentaria no puede comer nada que tenga dicho alimento o haya podido ser contaminado por este.
Pues hace años (aún adolescente) celebramos nochebuena en casa de familiares (yo me llevaba mi comida) y todo bien. Pues después de la cena vamos a saludar y felicitar la navidad a otro tío (político) y primos que había allí, todas las casas están en el mismo barrio.
Llegamos, estaba a 2 min, y la mesa puesta con lo típico chachinas, gambas, patas rusas, quesos y demás.
Pues eso entramos, felicitamos la navidad y demás, y lo típico que te dicen de tomas picado algo (mi tío con las manos metidas en las gambas A las que soy alérgica.
Yo cuando veo una mesas llena de marisco me empieza a entrar mal cuerpo ya, así que a una distancia prudencial le digo que no me apetece que ya estaba llena.
Y el: no seas tímida toma gambitas que está muy buenas!! (Acercándome el plato) Y yo: no no que soy alérgica, no las puedo comer

Y el: bueno pues patas, toma toma y yo: no puedo. Y aquí entra mi prima y le dice: que la niña se pone mala y no puede comer eso!
Ahí ya como que se le enciende la bombilla y dice bueno pues queso si puede no? (Todo esto cogiéndolo con las manos de pelar gambas) lo miro y había bigotes de gambas...
Me excuso diciendo que tenía que ir al baño (os juro que tenía sudores y todo) desde el baño le escucho relatando todo lo que tenía en la mesa que no eran gambas o patas...
Cuando salgo ya lo vi coger un plato con carne (socorro) le dije a toda prisa que tenía que con fulanito a tirar fuegos y le despedí y salí rápido.
Los demás tardaron en volver porque les hizo comer

La alergia a los crustáceos es un coñazo en navidad, y ahí la anécdota del día que tuve que salir por patas (nunca mejor dicho) de casa de mío.