Francisca Cadenas, desaparecida en Hornachos.

  • Autor AutorJla
  • Fecha de inicio Fecha de inicio
Una pregunta que no me ha quedado claro. La madre del GC y la hermana vivían en Mérida y tuvieron que abandonar la ciudad por algo que pasó con esta gitana, pareja del GC? Te lo pregunto porque estoy buscando noticias relacionadas, pero que tengan que ver con Mérida y gitanos sólo me aparece algo muy gordo que sucedió en el 2011. Pero ahí eran todos gitanos, y el GC es payo, no?
No te metas en "fandangos", Sabelotodo,que es lo que me dice a mi la gallega,controla los impulsos,espera,y no viajes en AVE,mejor el correo,donde se hacen amigos y amigas,y si hace falta se come un bocadillo,tranquilízate y ya verás los resultados.- Un abrazo.-
 
A mi lo que me llama la atención de este caso es que el hijo que salió el otro día en Espejo Público repitiera una y otra vez que pasados diez minutos se preocupó y salió a buscarla y que ya 'se puso en lo peor'. Esto, como digo, lo repitió varias veces.

Yo no sé, pero 10 minutos no es como para ponerse en lo peor. Y menos en un pueblo pequeño que en apariencia es tranquilo, un sitio en el que se conocen todos. ¿Por qué en tan corto espacio de tiempo desde que vió a su madre y le dijo que volvía enseguida, se puso en lo peor? Diez minutos no es nada y se podía haber entretenido hablando con alguien ¿qué es lo que le hizo 'ponerse en lo peor'?
Buena pregunta.
 
Muchas veces no depende tanto de la estima que te tengan sino del carácter de la persona. Yo por ejemplo me preocupo enseguida, pero mi marido es muy tranquilo y para que se preocupe, mucho tiene que pasar.
Yo, haciéndome la pregunta que propone loresilva, creo que mi familia tardaría mucho más que 10 minutos en empezar a preocuparse. Se ve que el hijo de Francisca tiene mi carácter y enseguida se mosqueo. A mi, de todas formas, también me parece poco tiempo. Es como si él tuviera ya algo en la cabeza.
Sí, es como si él ya temiera algo previamente a la desaparición de su madre, que algo pudiera suceder.
 
De Manuela Chavero a Francisca: la misteriosa desaparición de otra mujer en Badajoz

A ambas se les perdió el rastro de noche. Sus casas están en dos pueblos a 65 kilómetros de distancia.

En Hornachos, un pueblo de 3.700 habitantes en la provincia de Badajoz, hay una familia que está viviendo la desaparición de uno de sus miembros. Una dramática situación semejante a la que pasaron los allegados de Manuela Chavero hace 10 meses, cuando se le perdió el rastro muy cerca de aquí, en Monesterio. Ambos pueblos están separados por menos de una hora en coche.

Los cuerpos delgados de ambas mujeres, su pelo rubio, su repentina ausencia en mitad de la noche… En ambos casos existen algunas coincidencias, pero por el momento no hay ninguna conexión fiable.

“Es una incertidumbre inmensa no saber qué le pudo pasar a mi madre esa noche”, dice Javier, rostro serio, mirada apagada. “Es como si se hubiera esfumado”. El chico es el mediano de los tres hijos de Francisca Cadenas Márquez. La mujer, un ama de casa de 59 años vecina de Hornachos, desapareció el pasado martes 9 de mayo. Fue en torno a las 11 de la noche.

Javier había empezado a pintar la casa de su madre el mismo día que desapareció y, según cuenta a EL ESPAÑOL, no había notado nada raro "ni ese día ni en los días previos".
Francisca iba vestida con unas mallas negras, una camiseta rosa de manga corta y unas zapatillas también negras de la marca Nike. Antes de que se le perdiera el rastro salió de su casa para acompañar hasta el coche a una pareja y a su hija (amigos de la familia) que habían estado de visita en su casa. Dijo que volvía en cinco minutos para prepararle la cena a José Antonio, el menor de sus hijos. Pero no retornó. Casi dos semanas después, nada se sabe de ella.

Aunque existen diferencias entre ambos casos, a 65 kilómetros de Hornachos Manuela Chavero desapareció de su vivienda a principios de julio de 2016. Después de haber pasado la noche con una amiga en su casa, Manuela, de 42 años, se despidió de ella y volvió a meterse en su residencia, situada a las afueras de Monesterio. Vivía sola. Cuando su familia se presentó allí se encontró con la puerta abierta y sin forzar, la luz del comedor encendida y la televisión en marcha. Desde entonces, todo son incógnitas. "Hay miedo por si hubiera un loco suelto. Creemos que no, pero ¿y si nos equivocamos?", se pregunta una vecina de Francisca.

“VUELVO YA Y TE PREPARO LA CENA”
Francisca pasó la tarde y el inicio de la noche en su casa de la calle Nueva, en el centro de Hornachos. Lo hizo junto a Antonio, guardia civil destinado en el pueblo, su mujer, Adelaida, y la niña de ambos. El matrimonio y su pequeña fueron a visitarla, como hacían casi a diario.

“Son amigos de la familia. Venían muchas veces. Incluso, la niña se ha quedado aquí a dormir cuando los padres lo han necesitado porque tenían algún familiar en el hospital o por otra razón”. En la casa también estaba la madre de Francisca, ya anciana, a la que había acostado en su cama mientras ellos charlaban en una sala de estar.

En torno a las 22.50 horas de aquel martes llegaron a la vivienda Diego Meneses, marido de Francisca, y dos de sus hijos: el mayor, también Diego (38) y el pequeño, José Antonio (22). El mediano, Javier, estaba en su propia casa con su pareja, ya que vive independizado.

Diego padre y sus dos hijos habían estado en un bar viendo la vuelta de las semifinales de Champions League que disputaron en Turín la Juventus y el Mónaco. Al día siguiente jugaron Atlético de Madrid y Real Madrid en el estadio Vicente Calderón.

Cuando el marido de Francisca y sus dos vástagos llegaron a casa, se encontraron con Antonio y Adelaida, que ya se marchaban. Se despidieron, sin más. Pero Francisca los acompañó hasta el coche para que la hija de Antonio y Adelaida, a la que quiere mucho, no llorase.

Javier, el mediano de los hijos de Francisca y quien atiende a EL ESPAÑOL a las puertas de su casa, cuenta que su madre le dijo a su hermano pequeño: “Vuelvo ya y te preparo la cena. No te preocupes”. Dejó abiertas la puerta de acceso al descansillo de la casa y también la de entrada a la vivienda. En apariencia, su idea era volver.

EL COCHE DEL GUARDIA CIVIL ESTABA A 50 METROS
Javier acompaña al reportero hasta el lugar en el que estaba aparcado el coche del guardia civil. Por el camino recorremos 20 metros arriba por la calle Nueva, que no tiene salida, salvo a través de un callejón techado y con bolardos en la acera que impiden el acceso a los coches. Por él llegamos a la calle Hernán Cortés. Cuando salimos de ese túnel de apenas 20 metros de largo, caminamos otros diez.

Es entonces cuando Javi señala el lugar que ocupaba el vehículo, justo en la acera de enfrente. En ese punto, cuenta el chico, Francisca le dio un beso a la niña de sus amigos y, supuestamente, hizo el recorrido en sentido contrario al que acabamos de realizar a pie.

“Cuando nos preocupamos por mi madre, que no volvía, llamamos a Antonio y a Adelaida. Él nos dijo que, tras despedirse de mi madre, arrancó el vehículo. Nos contó que la vio volviendo a entrar por el callejón a través del retrovisor derecho de su coche [lo que es posible por la angulación y la distancia]. Luego, se marchó a su casa con su mujer y su hija”.

Pero Francisca no volvió. No se sabe si, como ha contado el guardia civil (Antonio) a los compañeros del cuerpo que llevan la investigación, la mujer fue de nuevo hacia su casa. De ser ciertas las palabras del agente que le había visitado aquella noche, ahora se abren dos hipótesis: la primera, que alguien estuviera esperando a Francisca en aquel callejón sin iluminación; la segunda, que la mujer accediera a él y que luego emprendiera otro camino de forma voluntaria.

También es posible que Antonio, quien rechaza atender a los medios, en realidad no viera a Francisca adentrarse por el callejón. Por el momento la Guardia Civil, que ha asumido la investigación, no sabe qué ocurrió. Mientras, el caso se encuentra bajo secreto de sumario en los juzgados de Zafra (Badajoz).

ROSTROS PARECIDOS, BATIDAS INFRUCTUOSAS
Tras la desaparición de Francisca, su familia ha estado recorriendo las carreteras y los campos cercanos a Hornachos y a pueblos próximos. Su marido y sus tres hijos han mirado en pozos, en cunetas, en descampados. Pero nada. Este sábado se unieron 800 vecinos del pueblo a una batida infructuosa que se saldó con el hallazgo de un animal muerto envuelto en una bolsa. En la búsqueda de Francisca también participó Emilia, hermana de Manuela Chavero, quien hace diez meses también organizó jornadas para tratar de encontrarla.

Ante los medios de comunicación Emilia descartó que tuvieran alguna relación ambos casos, el de la desaparición de su hermana y el de Francisca. Lo mismo piensa Javier, el mediano de los hijos de Francisca. “Son contextos diferentes. Manuela Chavero tiene 17 años menos que mi madre. Ella tenía WhatsApp y mandó mensajes poco antes de desaparecer [se está investigando al hombre con el que se escribió]. Mi madre, en cambio, no tenía esa aplicación ni tampoco redes sociales. Estoy convencido de que no guardan relación”.

Pero por el momento los investigadores no descartan nada ya que en ambos casos tienen muchas dudas y muy pocas certezas. Pese a que una tiene 59 años y la otra 42, ambas son rubias, tienen el rostro fino, son de complexión delgada y desaparecieron de noche.

Además, las dos mujeres vestían ropa cómoda, ninguna se llevó tarjetas bancarias ni documentos de identidad y sus dos pueblos están separados por sólo 65 kilómetros de carretera y dos embalses. “Esto es desesperante. Ojalá mi madre aparezca viva”, dice Javier antes de adentrarse en la casa a la que no ha vuelto Francisca.

http://www.elespanol.com/reportajes/20170521/217728571_0.html









 
"Pero Francisca no volvió. No se sabe si, como ha contado el guardia civil (Antonio) a los compañeros del cuerpo que llevan la investigación, la mujer fue de nuevo hacia su casa. De ser ciertas las palabras del agente que le había visitado aquella noche, ahora se abren dos hipótesis: la primera, que alguien estuviera esperando a Francisca en aquel callejón sin iluminación; la segunda, que la mujer accediera a él y que luego emprendiera otro camino de forma voluntaria.

También es posible que Antonio, quien rechaza atender a los medios, en realidad no viera a Francisca adentrarse por el callejón."

A mí de las tres hipótesis que plantea el reportaje la la que me parece más probable es que Antonio no viera a Francisca, porqué mentiría? porqué no atiende a los medios?
 
"Pero Francisca no volvió. No se sabe si, como ha contado el guardia civil (Antonio) a los compañeros del cuerpo que llevan la investigación, la mujer fue de nuevo hacia su casa. De ser ciertas las palabras del agente que le había visitado aquella noche, ahora se abren dos hipótesis: la primera, que alguien estuviera esperando a Francisca en aquel callejón sin iluminación; la segunda, que la mujer accediera a él y que luego emprendiera otro camino de forma voluntaria.

También es posible que Antonio, quien rechaza atender a los medios, en realidad no viera a Francisca adentrarse por el callejón."

A mí de las tres hipótesis que plantea el reportaje la la que me parece más probable es que Antonio no viera a Francisca, porqué mentiría? porqué no atiende a los medios?
Siempre tres,.-
 

Bueno, según esto sí que saben quién es: "Un vigilante del canal de Lobón halló ayer, hacia las 9.30 horas, el cadáver de un hombre de quien inicialmente se desconocía su identidad...". Ese "inicialmente" indica que, o bien al encontrarlo de desconocía su identidad (y ahora alguien ya la sabe), o que los informadores la desconocen pero alguien (fuerzas de seguridad) lo ha identificado. Eso es lo que entresaco de la crónica si es que no está mal redactada.

A todo esto, buenas, un saludo. Probablemente yo no aporte nada porque no soy quién para juzgar, ni para investigar, doctores tiene la Iglesia... Aunque me parece normal que que lo hagáis ya que esto es un foro, aun viendo a algún detective aficionado de tercera que no sé cómo no lo tiene fichado ya la CIA, el FBI, el MOSAD... en fin.

Me he registrado con probabilidad únicamente (aunque no se puede decir de este agua no beberé) por seguir este desconcertante caso. He leído todo el hilo en este y otros foros y, al igual que en los hilos sobre Diana Quer y otras desapariciones, siento lástima y pena al ver la poca falta de respeto con el que algunos foreros se refieren a esta mujer y lo que esto debe doler a la familia. Ojalá no desaparezcamos nunca, porque en cualquier lugar de internet alguien se va a sacar de la manga amantes desconocidos, malos tratos, o cualquier otro invento, como diría Sara Montiel, sin base ni fundamento alguno (que no digo que no sea posible, pero no me parece de buen gusto). ¿Qué pensarían nuestras familias, sufriendo con nuestra desaparición, si leyesen algunas barbaridades que la gente suelta? A la desgracia de un ser querido desaparecido hay que añadir que te juzguen, te pongan en el candelero, etc., y no solo a ti sino a la persona que has perdido.

Debo decir que no tengo televisión, mi ordenador es antiguo por lo que no me deja ver vídeos y no tengo móvil (soy pobre y lo digo con pena en un país de pobres) y por tanto no he visto ningún vídeo de ningún programa, por lo que mi conocimiento del caso se limita a lo que he leído en prensa escrita y en foros. Y sobre esta desaparición, FALTA MUCHA INFORMACIÓN y hay un gran desconocimiento, versiones diferentes... Y personalmente no haría una casa con ladrillos pero sin cemento, y por eso sin toda la información yo no me aventuro a hacer ninguna hipótesis, ya que seguramente luego tendría que desdecirme, y como no soy investigador a ellos les dejo que hagan su trabajo, que para eso les pagamos entre todos.

Antes de decir alguna cosilla que otra, aquí un enlace sobre un misterioso caso de hace años que a mí se me hace bastante parejo a la desaparición de la señora Cadena:

http://extraconfidencial.com/notici...lleva-25-anos-sin-noticias-sobre-su-paradero/

Un hombre, con un puesto de responsabilidad en un hospital importante, desaparece sin dejar rastro en lo que a mí me parecen circunstancias bastante similares a las de Francisca (¿voluntariamente? Quizás...). Y como en el caso del "niño pintor", no hay ni pistas, ni sospechosos, ni nada. No se ha vuelto a saber de ellos. Una de esas "desapariciones inquietantes"... por ahora, pues quién nos dice que en X años no se vea resuelta, como se han resuelto otras, con final feliz o trágico muchas veces. Para desapariciones raras, éstas (asumiendo que se fa credibilidad a la página, pues no me he molestado en investigar caso por caso mencionado):

http://marcianitosverdes.haaan.com/...ue-tuvieron-reapariciones-extraas-aos-despus/

¿Motivos? No todo crimen (y no digo que esta desaparición lo sea, y así lo espero) tiene por qué tenerlo. La historia de la criminología está plagada de "no sé porqué lo maté", "lo hice, no tenía ningún motivo" o simplemente no dicen nada porque no lo hay, no saben. Lo mismo con las desapariciones voluntarias. La gente se va, sin más, hay a quien le da un impulso y a quien le da la tramontana. Y luego aparecen. O no.

¿Qui prodest esta desaparición de la señora Cadenas? Aparentemente a nadie pero, como digo falta MUCHA información.

Y una de las cosas que me han llamado la atención en este caso, de ser cierta, es por qué los "amigos", padres de la niña que la señora Cadena cuidaba, (hablo en plural pero he leído en unos sitios que sólo estaba el padre, en otros que sólo la madre y en otros que ambos), miraron (suponiendo que "miraran") por el retrovisor. ¿Por inercia? ¿Querían asegurarse de que Francisca llegase sana y salva (¿por qué?)? ¿"Nosotros no fuimos"?

Personalmente me llama mucho la atención la falta de información especialmente sobre esas personas, líbreme Zeus de atribuirles responsabilidad alguna en el hecho porque estaría conjeturando y echando piedras contra mi propio tejado, pero, no sé, si yo fuese tan amigo de una persona que ha desaparecido, o digámoslo de otra forma, desaparece en circunstancias misteriosas la persona que cuida de mi hija (con retribución económica o no, que tampoco se sabe), y PRECISAMENTE después de que me la deje... no sé, creo que no me quedaría en el anonimato, pero de estos amigos no se sabe siquiera que hayan apoyado o mostrado solidaridad a la familia (que igual lo han hecho en privado y la familia no lo ha mencionado por X razones)... Pero claro, no todos somos iguales, y supongo que sus motivos tendrán para querer seguir en el anonimato, pero no olvidemos que han sido protagonistas (espero y supongo que involuntarios) de un hecho infausto.

Lo mismo con el "testigo", que poco o más bien nada se sabe de él. En el caso Alcasser, por ejemplo, sabíamos cómo y quién era la amiga enferma que no acompañó a las niñas, la pareja que las acercó a la gasolinera, el amigo que las saludó, incluso la señora que las vio subir al coche desde su ventana (con nombres y apellidos). Pero aquí supongo que aún es pronto e irán saliendo cosas si por desgracia el caso no se resuelve pronto.

Pero por ahora, con tantas lagunas de información que tenemos a pie de calle, ninguna hipótesis puede estar completa. Y especialmente en este caso hay tantas y tan enormes lagunas de información... Por ejemplo, me pregunto, así, a bote pronto:

-¿El "testigo" que se la encontró en el callejón está identificado, ha hablado, o sólo es una especulación de la prensa (igual que cuando soltaron que se llevó el DNI y luego tuvieron que rectificar)?

-Ídem con la pareja padres de la niña. ¿Dónde están, quiénes son, son "muy amigos" de la familia, íntimos, conocidos...? ¿Son "amigos" de toda la familia o sólo de Francisca?

-El famoso bar donde supuestamente estaba "el testigo" (o por dónde pasó, o algo así, creo recordar) y el marido y un hijo. ¿Nadie ha salido a decir nada? Los bares suelen ser el primer lugar donde los periodistas de sucesos suelen acudir en busca de información y normalmente en casos así no suele faltar alguien muy dispuesto a hablar ante la cámara, pero aquí parece todo lo contrario...

-Y muchas más preguntas que me hago pero que ahora no vienen al caso. Y tanto silencio me huele a miedo o a tapadera, es mi impresión, o bien se les ha indicado (?) que no hablen.

Ahora bien, teniendo toda la información podríamos aventurarnos a lanzar hipótesis, en las cuales, descontando conspiranoias tipo cuarta dimensión y eso, y descartando la desaparición voluntaria, ayudada o no por alguien, "tendríamos" que prácticamente dar por hecho, como decís, que alguien miente: la familia, todos o algunos de sus miembros, el testigo, los amigos... es como apenas hay información cabría incluir aquí también a la gente del bar, porque me imagino a bastantes personas viendo el partido, quizás lleno (¿aforo y tamaño del bar?). ¿Descabellado? Mucho. Pero si alguien miente, ¿por qué no podrían haberse puesto de acuerdo para dar una coartada a alguien?

Y puestos a desbarrar hasta podría mentir todo el pueblo, o más bien que que mintiesen (porque que todos tuvieran algo contra esta señora, al estilo Fuenteovejuna o el "Orient Express" de Agatha Christie me parece demasiado desbarrar), que no hablasen por encubrir, por la razón que fuese, a quien o quienes la hicieron desaparecer, si es que alguien la hizo desaparecer. Vamos, una "omertá" en toda regla. Cosas más raras veredes...

A día de hoy y tal como están las cosas, si no se ha tratado de una desaparición voluntaria ni de un asesino suelto (no creo que este caso tenga relación con el de Manuela Chavero), todos son sospechosos mientras no se demuestre lo contrario.

Cierto, no hay crimen, no hay cuerpo, pero hay una persona desparecida. Y he observado que a algunos foreros (de aquí y de otros foros) les parece extraño que diez minutos después uno de sus hijos ya la estuviese buscando. Yo no lo veo descabellado; si a alguien su madre le dice que vuelve en unos minutos a hacer la cena y no aparece, imagino que, aun no temiendo nada malo, la mayoría de las personas se interesarían por saber por qué no ha regresado a la hora prevista y saldrían a ver dónde, en qué o con quien se ha entretenido. A ver, si yo soy, por ejemplo, tu compañero de piso y te digo, por ejemplo: "oye, ve poniendo los fideos en el micro que salgo a echar un pito y vengo", y a los diez minutos no vuelve, supongo que cualquiera saldría a ver qué pasa, con mayor motivo si se trata de tu madre la que tarda en regresar... Y a ver, igual que digo H digo B, y puestos a hacer de abogados del diablo, si yo, solo o en compañía de otros, asesino a mi compañero de piso, y compinchado con otra/s personas hubiese hecho desaparecer el cuerpo, me invento lo del pito y soy el primero en dar la voz de alarma, ya que eso desviaría la atención, pues mientras se le busca probablemente nadie imaginaría que esa persona está en mi poder; es que se me ha venido a la cabezael relato de E. A. Poe "La carta robada" donde lo que se busca estaría "a la vista" de todos, solo que nadie se daría cuenta. Y no estoy poniendo ni dejando de poner en el punto de mira a nadie, Zeus me libre, que sólo estaba pensando en "La carta robada".

Pero, si todos son sospechosos, yo haría como Auguste Dupin y me pondría en el lugar del sospechoso. Ahí estaría la clave. ¿Que haría cada uno de ellos, Francisca Cadena incluida?
 
Ah, bueno, genial, fenomenal, mientras yo hago mi entrada triunfal en este foro haciéndome cientos de preguntas resulta que mientras escribía y me preguntaba, y me preguntaba... pues ya se saben hasta los nombres de los amigos. A esto se le llama entrar por la puerta grande... :blackeye:
 
Quizás no se puso en lo peor. Como digo arriba, puede que saliese para ver en qué se entretuvo su madre, sin más.

Que bueno seria saber,(que no lo sabremos),quien sabe?... si el "morenito",es confidente de la GC,verdad??.
Yo apostaría que sí,...Al igual que Nigeria,en Puebla del Caramiñal,- Naturalmente que el morenito con menos rango- pues en estos oficios hay categorias;pero bueno.......hay que ir poco a poco,no se puede pedir todo de un golpe.- Si yo estuviese en lo cierto en esto,vosotros tambien ,verdad?.-
 
De Manuela Chavero a Francisca: la misteriosa desaparición de otra mujer en Badajoz

A ambas se les perdió el rastro de noche. Sus casas están en dos pueblos a 65 kilómetros de distancia.

En Hornachos, un pueblo de 3.700 habitantes en la provincia de Badajoz, hay una familia que está viviendo la desaparición de uno de sus miembros. Una dramática situación semejante a la que pasaron los allegados de Manuela Chavero hace 10 meses, cuando se le perdió el rastro muy cerca de aquí, en Monesterio. Ambos pueblos están separados por menos de una hora en coche.

Los cuerpos delgados de ambas mujeres, su pelo rubio, su repentina ausencia en mitad de la noche… En ambos casos existen algunas coincidencias, pero por el momento no hay ninguna conexión fiable.

“Es una incertidumbre inmensa no saber qué le pudo pasar a mi madre esa noche”, dice Javier, rostro serio, mirada apagada. “Es como si se hubiera esfumado”. El chico es el mediano de los tres hijos de Francisca Cadenas Márquez. La mujer, un ama de casa de 59 años vecina de Hornachos, desapareció el pasado martes 9 de mayo. Fue en torno a las 11 de la noche.

Javier había empezado a pintar la casa de su madre el mismo día que desapareció y, según cuenta a EL ESPAÑOL, no había notado nada raro "ni ese día ni en los días previos".
Francisca iba vestida con unas mallas negras, una camiseta rosa de manga corta y unas zapatillas también negras de la marca Nike. Antes de que se le perdiera el rastro salió de su casa para acompañar hasta el coche a una pareja y a su hija (amigos de la familia) que habían estado de visita en su casa. Dijo que volvía en cinco minutos para prepararle la cena a José Antonio, el menor de sus hijos. Pero no retornó. Casi dos semanas después, nada se sabe de ella.

Aunque existen diferencias entre ambos casos, a 65 kilómetros de Hornachos Manuela Chavero desapareció de su vivienda a principios de julio de 2016. Después de haber pasado la noche con una amiga en su casa, Manuela, de 42 años, se despidió de ella y volvió a meterse en su residencia, situada a las afueras de Monesterio. Vivía sola. Cuando su familia se presentó allí se encontró con la puerta abierta y sin forzar, la luz del comedor encendida y la televisión en marcha. Desde entonces, todo son incógnitas. "Hay miedo por si hubiera un loco suelto. Creemos que no, pero ¿y si nos equivocamos?", se pregunta una vecina de Francisca.

“VUELVO YA Y TE PREPARO LA CENA”

Francisca pasó la tarde y el inicio de la noche en su casa de la calle Nueva, en el centro de Hornachos. Lo hizo junto a Antonio, guardia civil destinado en el pueblo, su mujer, Adelaida, y la niña de ambos. El matrimonio y su pequeña fueron a visitarla, como hacían casi a diario.

“Son amigos de la familia. Venían muchas veces. Incluso, la niña se ha quedado aquí a dormir cuando los padres lo han necesitado porque tenían algún familiar en el hospital o por otra razón”. En la casa también estaba la madre de Francisca, ya anciana, a la que había acostado en su cama mientras ellos charlaban en una sala de estar.

En torno a las 22.50 horas de aquel martes llegaron a la vivienda Diego Meneses, marido de Francisca, y dos de sus hijos: el mayor, también Diego (38) y el pequeño, José Antonio (22). El mediano, Javier, estaba en su propia casa con su pareja, ya que vive independizado.

Diego padre y sus dos hijos habían estado en un bar viendo la vuelta de las semifinales de Champions League que disputaron en Turín la Juventus y el Mónaco. Al día siguiente jugaron Atlético de Madrid y Real Madrid en el estadio Vicente Calderón.

Cuando el marido de Francisca y sus dos vástagos llegaron a casa, se encontraron con Antonio y Adelaida, que ya se marchaban. Se despidieron, sin más. Pero Francisca los acompañó hasta el coche para que la hija de Antonio y Adelaida, a la que quiere mucho, no llorase.

Javier, el mediano de los hijos de Francisca y quien atiende a EL ESPAÑOL a las puertas de su casa, cuenta que su madre le dijo a su hermano pequeño: “Vuelvo ya y te preparo la cena. No te preocupes”. Dejó abiertas la puerta de acceso al descansillo de la casa y también la de entrada a la vivienda. En apariencia, su idea era volver.

EL COCHE DEL GUARDIA CIVIL ESTABA A 50 METROS

Javier acompaña al reportero hasta el lugar en el que estaba aparcado el coche del guardia civil. Por el camino recorremos 20 metros arriba por la calle Nueva, que no tiene salida, salvo a través de un callejón techado y con bolardos en la acera que impiden el acceso a los coches. Por él llegamos a la calle Hernán Cortés. Cuando salimos de ese túnel de apenas 20 metros de largo, caminamos otros diez.

Es entonces cuando Javi señala el lugar que ocupaba el vehículo, justo en la acera de enfrente. En ese punto, cuenta el chico, Francisca le dio un beso a la niña de sus amigos y, supuestamente, hizo el recorrido en sentido contrario al que acabamos de realizar a pie.

“Cuando nos preocupamos por mi madre, que no volvía, llamamos a Antonio y a Adelaida. Él nos dijo que, tras despedirse de mi madre, arrancó el vehículo. Nos contó que la vio volviendo a entrar por el callejón a través del retrovisor derecho de su coche [lo que es posible por la angulación y la distancia]. Luego, se marchó a su casa con su mujer y su hija”.

Pero Francisca no volvió. No se sabe si, como ha contado el guardia civil (Antonio) a los compañeros del cuerpo que llevan la investigación, la mujer fue de nuevo hacia su casa. De ser ciertas las palabras del agente que le había visitado aquella noche, ahora se abren dos hipótesis: la primera, que alguien estuviera esperando a Francisca en aquel callejón sin iluminación; la segunda, que la mujer accediera a él y que luego emprendiera otro camino de forma voluntaria.

También es posible que Antonio, quien rechaza atender a los medios, en realidad no viera a Francisca adentrarse por el callejón. Por el momento la Guardia Civil, que ha asumido la investigación, no sabe qué ocurrió. Mientras, el caso se encuentra bajo secreto de sumario en los juzgados de Zafra (Badajoz).

ROSTROS PARECIDOS, BATIDAS INFRUCTUOSAS

Tras la desaparición de Francisca, su familia ha estado recorriendo las carreteras y los campos cercanos a Hornachos y a pueblos próximos. Su marido y sus tres hijos han mirado en pozos, en cunetas, en descampados. Pero nada. Este sábado se unieron 800 vecinos del pueblo a una batida infructuosa que se saldó con el hallazgo de un animal muerto envuelto en una bolsa. En la búsqueda de Francisca también participó Emilia, hermana de Manuela Chavero, quien hace diez meses también organizó jornadas para tratar de encontrarla.

Ante los medios de comunicación Emilia descartó que tuvieran alguna relación ambos casos, el de la desaparición de su hermana y el de Francisca. Lo mismo piensa Javier, el mediano de los hijos de Francisca. “Son contextos diferentes. Manuela Chavero tiene 17 años menos que mi madre. Ella tenía WhatsApp y mandó mensajes poco antes de desaparecer [se está investigando al hombre con el que se escribió]. Mi madre, en cambio, no tenía esa aplicación ni tampoco redes sociales. Estoy convencido de que no guardan relación”.

Pero por el momento los investigadores no descartan nada ya que en ambos casos tienen muchas dudas y muy pocas certezas. Pese a que una tiene 59 años y la otra 42, ambas son rubias, tienen el rostro fino, son de complexión delgada y desaparecieron de noche.

Además, las dos mujeres vestían ropa cómoda, ninguna se llevó tarjetas bancarias ni documentos de identidad y sus dos pueblos están separados por sólo 65 kilómetros de carretera y dos embalses. “Esto es desesperante. Ojalá mi madre aparezca viva”, dice Javier antes de adentrarse en la casa a la que no ha vuelto Francisca.

http://www.elespanol.com/reportajes/20170521/217728571_0.html











¿Por que ha tardado tanto "El Español" en soltar toda esta información y por qué intenta colarnos tan poco sutilmente que el caso de Francisca Cadenas está relacionado con el de Manuela Chavero?

Bueno, ya sabemos que los amigos eran amigos de la familia, no sólo de Francisca, que era una de mis dudas existenciales, y que se llaman Antonio y Adelaida. También que francisca NO cuidaba (habitualmente) a la niña, sino que ésta se quedaba a dormir ocasionalmente. Que la madre de Francisca vivía con ellos, y además, que dos de los hijos estaban viendo el partido con el padre, no sólo uno como hasta ahora tenía entendido.

Vale que le dijera al hijo "que volvía en cinco minutos", es una frase bastante típica, sobre todo si vas a estar un ratillo despidiendo a unos amigos. Ahora bien, no sé si poner en duda que Francisca le hubiera dicho al hijo pequeño: “Vuelvo ya y te preparo la cena. No te preocupes”. ¿"No te preocupes"? ¿Acaso había algún motivo de preocupación?

Esta frase me parece rara, rara, y no me da la impresión de que sea una forma de hablar.
 

Temas Similares

2
Respuestas
16
Visitas
2K
Back