Pues hablando de gente que siempre tiene que llamar a la poli y de los "no hemos visto nada".
Una vecina mía padeció insomnio por años, creo que lo que más dormía a lo largo de una noche podría ser tres horas, así por años, tenía una historia de nervios que le hizo sufrir eso. Ya estaba acostumbrada, le encantaba mirar por la ventana para relajarse lo cual era una ventaja (se enteraba de todo y así avisaba a la poli), y desventaja: mucha gente la consideraba incómoda por cotilla, ojo, que no era una anciana, os hablo de entonces, una chica de entonces, sus veintitantos, para aliviar la movida de los nervios y el insomnio, a mirar por la ventana o se salía a la terraza. Yo ya sabía que si había ido la poli al barrio, había llamado ella y no me equivocaba.
"Gracias" a eso, vigilaba el barrio, aunque fuera una putada su historia personal de salud.
¿Lo veis? Esa chica pasaba horas en la terraza de noche porque tenía una movida de salud y todo el barrio decía "se pasa horas en la terraza", pero ojo, cuando había movida en el barrio nadie veía nada, ¿como sabían que mi vecina entonces se pasaba las horas por la noche en la terraza? Porque todo el mundo cotillea detrás de visillos y mirillas.
Hemos presenciado las dos cosas brutales, desde una explosión hasta el hallazgo de un cadáver (su***dio) en otro edificio, con todo su "boato": forenses, policías haciendo fotos, jueces de guardia, bomberos, etc. Y nosotras comentando todo en directo, ¿eh?, que aún recuerdo a un bombero que nos miraba como diciendo "vaya par de marujas".
Y en esas movidas gordas, como el caso de la explosión (casi me caigo de la cama y tuve miedo de verdad, fue un coche), las dos ahí presenciando eso y nadie del edificio, ni del barrio había "visto nada", menuda panda de mentirosos.
Esta vecina se mudó de provincia y suelo echarla en falta cuando se lía, nos reuníamos en el rellano a "comentar" (o desde las terrazas, que risas ahí en directo con el suceso delante nuestra), esto de madrugada que eran las horas habituales de los sucesos.
Siempre comentábamos con sarcasmo que éramos las únicas en enterarnos de todo, y nos reíamos al pensar que el resto de vecinos estaban mirando por la mirilla mientras nosotras estábamos al pie del cañón.
Yo hasta hace poco he vivido siempre en el campo, donde no se veía absolutamente nada, y ahora que me he venido a la ciudad siempre que escucho lo más mínimo me levanto de la cama y me asomo por la ventana para enterarme bien de lo que está pasando. La verdad es que el barrio donde estoy no es el mejor, pero por lo menos no me aburro jajaja. Mi madre, que vive conmigo, siempre me dice soy una maruja, pero bien que cuando pasa algo es la primera en venirme a preguntar.
