El problema de toda esta situación es que yo no me siento cómoda.
No sé si me he explicado bien bien.
A mi me encantan las relaciones superficiales, la cháchara social y hablar con uno y con otro. Me siento como pez en el agua. Y estoy cómoda.
Pero me encuentro que cuando necesito abrirme y contar mis preocupaciones no me siento cómoda. Igual necesito hablarlo con alguien y no encuentro con quien. Y no es porque los demás hayan demostrado no ser dignos de mi confianza.
Por ejemplo, mi mejor amiga NUNCA JAMÁS contaría mis cosas a nadie, siempre me ha entendido. Le he contado cosas con las que no está de acuerdo y me ha apoyado siempre siempre. Llevamos 20 años de amistad y confío plenamente en ella.
Pues bien, mi pareja de entonces y yo nos sometimos a un tratamiento de fertilidad para ser padres y yo estaba totalmente perdida, necesitaba hablar con alguien pues no fui capaz de contarselo.
Ni a ella, ni a absolutamente nadie.
Se lo conté después, cuando ya me encontraba bien. Pero como que tengo un muro que me impide mostrarme vulnerable cuando lo que realmente necesito es un abrazo y apoyo.
Y eso me pasa con todo el mundo en mayor o menor medida.
Comentaba una prima (creo que pyske pero no estoy segura ahora y estoy con el móvil me es un rollo mirar) que tiene un amigo que es incapaz de prestar apoyo emocional. Yo con eso no tengo problema, es al revés, la gente acude a mi cuando necesita apoyo. A veces gente más cercana y a veces gente que alucino... Pero suelen venir a contarme cosas porque soy asertiva y ofrezco soporte emocional pero cuando lo necesito yo soy incapaz de pedirlo o darlo a entender aunque sea.
Y no es porque la gente sea odiosa ni nada, pero es que me cuesta muchísimo abrir esa puerta. Ya no digo con algo tan íntimo como lo del tratamiento de fertilidad...
Pero por ejemplo, cuando voy a hacerme una prueba médica o un examen, no lo cuento a nadie porque cuando suspendo me siento fatal y no quiero hablar con nadie hasta estar bien.
O entrevistas para trabajos que para mí sean importantes hago lo mismo.
Y no es que lo haga con el vecino del 5º, lo hago con mis amigos, familia, pareja... Y ya cuando me siento mejor lo cuento.
Pero en ese entre medias a veces necesito un abrazo y no puedo pedirlo a nadie porque no quiero contar qué me pasa.
Este mismo bloqueo me impide intimar con nadie aunque se lo merezca. Ese es el problema.
O sea, mi problema no es que no encuentre a nadie que merezca conocerme mejor es que hay un miedo, bloqueo o lo que sea que no me deja a mi avanzar.